FONAIAP   DIVULGA  No.  06                                                                                      Septiembre-Octubre    1982

La Tristeza de los Cítricos en Venezuela Sugerencia para su control

*Ing. Agr. Edmundo Monteverde

Investigador FONAIAP - CENIAP

La Tristeza de los cítricos fue detectada por primera vez en Venezuela en 1960 en árboles de limón " Meyer" y limón Criollo en el área de Maracay (3) y en 1980 en plantaciones comerciales de naranja en el sector de Durute del Edo. Yaracuy (1). Probablemente el virus de la Tristeza de los cítricos ha estado presente en Venezuela desde hace muchos años, sin embargo, el áfido negro grande de los cítricos (Toxoptera citricida Kirk) , principal vector de la enfermedad, solo fue señalado por primera vez en el país en el año de 1976 en el Distrito Baralt del Edo. Zulia cercano a la frontera con Colombia (2). Entre 1978-79, 2 años después, el áfido se extendió en todos los Valles Altos Carabobo-Yaracuy (- 650 m.s.n.m), la principal área citrícola del país situada aproximadamente a 1000 km de la frontera con Colombia. Esta situación evidencia la rapidez con que el áfido negro grande de los cítricos se ha estado moviendo, habiéndose inclusive detectado su presencia, a finales de 1980, en el área de Caripe, Edo. Monagas, la segunda área citrícola de importancia. Aún más, el virus de la Tristeza de los cítricos también ha sido señalado como presente en esa área a principios de 1982 ( 5 ). En estudios hechos para evaluar la presencia de enfermedades virales en árboles seleccionados en los Valles Altos en 1979, no encontramos ningún árbol infectado con Tristeza; en 1980 el 3,7 0/0 de los árboles indexados (testados) apareció infectado y en 1981 el 25% (4). 

En la parte de los Valles Bajos de Aragua (450 m.s.n.m.) hemos observado que en un solo huerto el 76 % de un total de 119 árboles están infectados con Tristeza. 

Por observaciones de campo hemos podido ver la casi total destrucción de huertos de naranjas en el sector La Guaricha, ubicado en Mariara, Edo. Carabobo, área cercana a Maracay. Todo esto ha evidenciado que ha habido una rápida dispersión, tanto del insecto vector como el virus, habiéndose aparentemente presentado una mayor incidencia de la enfermedad en las zonas bajas y cálidas, en contra a lo que comúnmente aceptado de que el virus de la Tristeza de los cítricos es un virus de temperaturas suaves ( 18 -25 °C), donde logra mayor virulencia la enfermedad. Habría que pensar que los huertos de los Valles Altos son mejor mantenidos y que por lo tanto el efecto destructivo de la enfermedad podría estar atenuado. 
Ante esta situación la gran interrogante sería: Qué hacer? Indiscutiblemente que en este momento existe mayor conocimiento del que existía en el sur del Continente (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) cuando se perdieron unos 20 millones de árboles cítricos entre 1940-1950 por efecto de la Tristeza. Sin embargo, el éxito de cualquier medida que se tome para atenuar el efecto del virus de la Tristeza va a depender del grado de concientización que hayan adquirido los productores citrícolas acerca del problema. Nosotros consideramos que las medidas deben estar orientadas a: 1) sustitución de los huertos, 2) utilización de patrones tolerantes al virus y 3) utilización de yemas libres de virus (Psorosis, Exocortis y Xyloporosis). 
 
Sustitución de huertos: Esta sustitución tiene que estar orientada a eliminar los árboles de naranjo dulce sobre naranjo agrio o cajera. Esta puede ser: a) intercalando plantas nuevas en las hileras de los árboles, b) sustitución parcial, y c) sustitución total. El intercalamiento de árboles en las hileras, es desventajoso cuando estos pasan de 8 años de edad porque el volumen de la copa de los árboles viejos causa un lento desarrollo de las plantas nuevas. En árboles más jóvenes este podría ser más ventajoso. La sustitución parcial, la cual recomendamos para árboles mayores de 8 años, consiste en la eliminación total y resiembra de hileras por lote o finca, programado de tal manera que al finalizar la sustitución del lote o finca (de acuerdo al tamaño de esta), el 60% haya entrado en producción de nuevo. Por ejemplo, si tenemos un lote o finca de 20 hileras, programamos la eliminación y resiembra de 4 hileras anualmente (Fig. 1 ). En esta forma tendríamos una área de producción en la siguiente forma: 1^° año, 80 %; 2°. año, 60%. 3° año, 40 %; 4° año, 40 % (entra a producción el primer resiembro); y 5°. año, 60 % y así se incrementaría anualmente el área de producción hasta llegar a un 100% con árboles nuevos. La sustitución total indudablemente se haría cuando se esté en presencia de huertos improductivos, ya sea afectado por la Tristeza o cualquier otro virus, o por envejecimiento. 

Fig. 1. Esquema de sustitución y resiembro de árboles cítricos en una finca o lote de 20 hileras con el objeto de obtener en árboles vigorosos y una superficie en producción permanente.

Sustitución de patrones: Cuando se va a establecer un huerto citrícola, una de las decisiones más importantes que hay que tomar es la selección del patrón, más en nuestro país donde los ensayos de patrones en cítrico y en especial en naranja dulce son muy escasos, o los que existen son muy nuevos para dar una información concluyente. Este problema se ve aumentado en el trópico, porque mientras los suelos de las áreas subtropicales donde se siembran cítricos son bastante uniformes, en el trópico generalmente una área ecológicamente uniforme presenta diversidades de suelos o mosaicos de suelos de diferentes texturas y constitución químicas. Esto significaría que habría que establecer un ensayo para cada zona dentro de una misma área. 

En los ensayos que lleva el CENIAP en los Valles Altos Carabobo - Yaracuy, se observa que existe una tendencia de la naranja "Valencia" sobre Citrus volkameriana a dar árboles más vigorosos y de mayor producción, sin embargo, la calidad de la fruta es inferior a la que suministra el patrón de naranjo agrio. La mandarina "Cleopatra" es un patrón que suministra buena calidad al fruto de naranja "Valencia" pero por la experiencia de otros países y la tendencia observada en los Valles Altos Carabobo-Yaracuy la producción es inferior en los primeros años. El patrón de "Cleopatra " se adapta mejor a suelos francos, pero es muy intolerante a suelos pesados. Los híbridos como "Troyer", "Carrizo" y "Swingle", aparentemente tienen buena perspectiva en Venezuela. En suelos pesados como los del Valle de Quibor se mantienen creciendo en forma vigorosa a pie franco, mientras el Citrus volkameriana mantiene un pobre desarrollo. 
 
Es necesario tener en cuenta que todos estos híbridos necesitan ser injertados con yemas libres de Exocortis a lo cual son muy susceptibles. A manera de ayudar a los citricultores a tomar decisión a cerca de cual patrón usar, estamos anexando una información en relación a las características más importantes de algunos patrones (Fig. 2). 

Yemas libres de virus: El uso de yemas libres de virus es otro factor importante a considerar en las condiciones actuales. Si es cierto que existe un amplio número de patrones cítricos desarrollados en otros países y que se podrían utilizar en Venezuela, también es cierto que no existe un patrón perfecto, generalmente estos patrones son susceptibles a una u otra enfermedad, por lo que la ventaja que representa su uso se perdería si no se usan con yemas libres de virus. Por esta razón el Fondo Nacional de Investigaciones Agropecuarias (FONAIAP), a través del Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias (CENIAP), ha comenzado a implementar durante el presente año el Servicio Nacional de Certificación de Plantas Cítricas a través de un grupo de viveros, con el objeto de que se produzcan plantas provenientes de los árboles productivos y libres de virus. 

El Ing. Agr. Edmundo E. Monteverde se graduó en la Facultad de Agronomía de la UCV, en el año de 1965. Hasta 1972 se desempeñó como agente de extensión y  especialista de extensión en Frutales para el Ministerio de Agricultura y Cría. Entre1973 -75 hizo la maestría en Ciencias en la Universidad de Florida, Gainesville, USA., con especialidad en Fruticultura. Entró a formar parte del FONAIAP en el año de 1976 como Investigador  III. A partir de esa fecha se ha dedicado a la investigación  en virus en cítricas y a la implementación del Servicio Nacional de Certificación de Plantas Cítricas. El Ing. Monteverde tiene varios cursos de entrenamiento y pasantías en virus en cítricos y Servicios Nacionales de Certificación de plantas cítricas, en España, la isla de Córcega, Florida y la Universidad de California, Riverside, USA. Además ha publicado unos veinte trabajos entre científicos y divulgativos.

 

1.- 1. BASTIDAS, A. 1980 El virus de la Tristeza que no existía en el país acaba de llegar. En P. C.2. El Nacional 04-05.80.
Caracas.

2. GERAUD, D. 1976. El áfido negro de las c!tricas Toxoptera citricida Kirkaldy en Venezuela (Resumen). I Encuentro Venezolano de Entomología, UCV. Fac. Agronomía, Inst. Zool. Agric. Maracay.

3. KNORR, L.C.; o. MALAoUTI y D. SERPA 1960 Descrubrimiento de la Tristeza" de los citricos en Venezuela Agron. Trop. 10 (1): 3.12.

4. MONTEVERDE, E.E. 1981 Informe de Gestión 1981 FONAIAP' CENIAP. 41 p.

5. MONTEVERDE, E;. E. 1982. Informe que presenta el coordina.
dor del rubro citricas sobre la visita de supervisión efectuada al campo experimental de Caripe y la Estación Experimental de El Tigre. FONAIAP - CENIAP. 3 p.