FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 20  Enero-Marzo  1986

  FONAIAP   DIVULGA  No.  20                                                                                                    Enero-Marzo    1986


En 28 años cambió la distribución  de la Diatrea  
en los campos de caña de azúcar

Pedro P. Paredes



El entomólogo H. E. Box logró determinar con exactitud para 1952, en cuáles regiones cañeras de Venezuela se encontraban las distintas especies de taladradores. Así, él demostró que Diatraea busckella se encontraba solamente en la región occidental del país, desde el oeste de Yaracuy , pasando por Lara, Trujillo, Mérida, Táchira y Zulia, en el Sur del Lago. Esta especie es luego encontrada cerca de San Felipe y Marín, al noreste de Yaracuy, en 1962; en caña sembrada entre San Fernando de Achaguas, en el Estado Apure (1977), con semillas provenientes de Trujillo. En Tovar (Mérida) y Araure (Portuguesa) en 1960, en Santa Cruz de Hucaral (Falcón) y Calderas (Barinas) en 1967. 

Algunos investigadores han señalado a esta especie como la predominante en Portuguesa y en el área del Central Ribero (Sucre), pero muestreos realizados por investigadores del CENIAP , muestran ausencia de ellas en esas zonas y posiblemente la hayan confundido con otra especie, muy abundante en esas zonas, como es la Diatraea rosa. Y esa confusión es común cuando se trata de identificar las especies en el estado larval del insecto. Ambas son muy parecidas y la forma de diferenciarlas plenamente es observar esas larvas hasta la fase de adulto. En el CENIAP lo hicimos así y comparamos el adulto con los ejemplares de la colección que nos dejó el Dr. Box. Por eso afirmamos con propiedad que nuestros numerosos muestreos en la amplia zona cañera de Portuguesa, en 16 años, no han logrado capturar algún ejemplar de D. busckella. 

El mismo Dr. Box señaló que la especie D. rosa era endémica en Venezuela, encontrándose desde Chivacoa y Nirgua (Yaracuy) hacia los Estados Carabobo, Aragua, Miranda, Sucre y Monagas, así como en pequeñas parcelas en Guárico, Apure, Cojedes y Araure (Portuguesa). Su distribución geográfica era bastante definida: Centro, Sur y Oriente del país y era responsable del mayor daño a la caña de azúcar en esas zonas. 

Esta especie autóctona también sufre cambios en su distribución: en 1959 se consigue en Rubio (Táchira), llevada en semilla proveniente de Carabobo. Ya en 1970 estaba en Ureña y en 1978 tenía dominio casi absoluto sobre la especie nativa D. busckella en el Táchira. En Yaritagua (oeste de Yaracuy) es encontrada en 1977 y un año más tarde se colecta en las áreas de influencia de los Centrales Matilde y Río Turbio. Pero no se consiguió hacia San Felipe y el área del Central Río Yaracuy, lo que hace sospechar que su introducción fue por cañas provenientes de Agua Blanca y Araure (Portuguesa) para moler en esos centrales. Nosotros la hemos conseguido en todas las zonas cañeras del Estado Portuguesa. 

Para 1952, Box ubicaba a Diatraea impersonatella en el Tocuyo (Lara), Cumanacoa (Sucre) y gramíneas silvestres en otros lugares. Más tarde fue encontrada en caña sembrada en Margarita, posiblemente llevada desde Cumanacoa. Pero ésta es una especie de poca importancia porque no tiene la difusión ni la agresividad de ataque vista en las especies mencionadas anteriormente. 

La especie más conocida de todas es la Diatraea saccharalis, presente en casi todo el país para 1962, variando solo en frecuencia: abundante en Lara, Aragua, Miranda y Guarico y ausente en Trujillo. Pero ya en 1953, es citada por primera vez en Motatán (Trujillo) y en Margarita, logrando cubrir todas las zonas. Últimamente ha disminuido su frecuencia, por ser la más apetecible para el depredador de diatrea por excelencia: la mosca amazónica (Metagonistylum minense)

Por último, está la Eodiatraea centrella, conocida en todo el país porque ataca los brotes pequeños de las socas. Sin embargo, últimamente se han notado daños en cañas maduras. Cuando el ataque es muy intenso se combate con insecticidas.

De los cinco taladradores de la caña de azúcar, nos ha merecido especial atención las dos especies nombradas primero: D. busckella y D. rosa. ¿A qué se ha debido ese cambio en su distribución? La respuesta es la intervención del hombre. Ha sido éste quien ha logrado trasponer las barreras naturales que mantienen a las especies en un determinado hábitat o área geográfica. El movimiento incontrolado de esquejes de caña de una zona a otra, sin la debida precaución de desinfectar las semillas, de escoger ésta de lotes sanos o al menor de averiguar si las especies de taladradores presentes en el sitio de la semilla son las mismas del sitio donde va a ser sembrada. Hasta el momento se desconocen las consecuencias de esta alteración del hábitat natural de las especies de taladradores; pero el hecho cierto que cada una de ellas es plaga de máxima importancia de la caña de azúcar en su hábitat inicial, hace presumir que la presencia de ambas, toma el problema más grave.
 

Variedades de caña de azúcar recomendadas por el FONAIAP Venezolanas:
V58-4, V64-10, V68-74, V68-78, V67-56
Importadas:
B6749, PR61632, CP5659, PR980