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FONAIAP DIVULGA > Colecci�n > N�mero 21 Abril-Junio 1986 | ||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
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FONAIAP DIVULGA No. 21 Abril-Junio 1986 |
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Gloria Mar�n P. |
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Estas especies de la familia Lutjanidae tienen un amplio rango de distribuci�n en la costa Atl�ntica del Continente Americano, formando parte importante de las pesquer�as litorales en la franja comprendida entre Massachusetts y las costas del Brasil, con un m�ximo de concentraci�n en el Golfo de M�xico y el Mar Caribe, siendo abundantes en las costas con un fondo irregular, formado particularmente por rocas y arrecifes de coral. A pesar de la importancia comercial de las especies de la familia Lutjanidae, en nuestro pa�s, se han hecho investigaciones de tipo taxon�mico y sobre algunos aspectos biol�gicos referente a una sola especie el pargo dient�n (Lutjanus griseus), mientras que en el resto de las especies de esta familia se desconoce b�sicamente su biolog�a, ecolog�a y pesquer�a. En Venezuela, seg�n (Cervig�n 1966), el g�nero Lutjanus al cual pertenecen los pargos esta representado por 10 especies: Lutjanus analis (pargo cebada), L. synagris (guanapo), L. purpureus (colorado) L. aya, L. vivanus, L. mahogoni, L. jocu, L. apodus, L. griseus (dient�n), L. bucanella y L. cyanopterus, todos de gran importancia comercial. De todas las especies nombradas anteriormente, el Lutjanus purpureus o Lutjanus aya, conocido vulgarmente por los pescadores de la zona como pargo colorado o pargo real, es probablemente la especie de mayor abundancia y la m�s conocida en la costa central del pa�s. Esta especie se caracteriza por su color rojo, moderadamente oscuro con reflejos plateados en la parte dorsal, ventral mente m�s claro y aletas rojizas con borde terminal negro. Particularmente la dorsal posee 10 espinas y 14 radios blandos. Su talla promedio es de 65 cm y seg�n algunos autores alcanza gran tama�o frecuentemente en fondos someros, rocosos y coralinos. Esta especie constituye aproximadamente el 80 % de los desembarques de pargos capturados en la zona central. En el a�o 1981, represent� el 15% de la producci�n pesquera nacional disminuyendo para el 1982 a 4,6% no obstante a pesar de su importancia econ�mica, los conocimientos sobre la biolog�a y pesquer�as de estas especies en la actualidad son muy escasas. En la Estaci�n Experimental del Distrito Federal del FONAIAP se vienen adelantando investigaciones sobre algunos aspectos de la biolog�a y pesquer�a de las especies demersales (peces de fondo) entre las cuales se encuentran los pargos. Estos estudios son de primordial importancia para el mejor conocimiento de la explotaci�n comercial de este recurso, que conllevan a un mejor manejo y control del mismo. La pesquer�a de pargo Lutjanus spp en la zona central del pa�s se realiza en la amplia faja costera mar�tima comprendida entre el Puerto de Tucacas (Estado Falc�n) y la Laguna de Tacarigua Estado Miranda) definida entre los 68� 18' y los 65� 56' longitud oeste. En esta zona se encuentran ubicadas numerosas comunidades pesqueras que se dedican en su mayor�a a la pesca artesanal del pargo y otras especies. Esta pesquer�a es muy importante desde el punto de vista socioecon�mico, ya que los ingresos que se derivan de su actividad constituye una de las fuentes de trabajo para los pescadores en la regi�n central. Los principales placeres de pesca son: Tucacas, Choron�, El Centinela, Higuerote, Tacarigua de la Laguna. La flota que se dedica a la pesca artesanal est� constituida por embarcaciones de diversos tipos y tama�os, predominando considerablemente las de bajo tonelaje (hasta 5 toneladas). Las campa�as est�n limitadas por condiciones tecnol�gicas rudimentarias y por artes de pesca de captura no masivas (nasas, cordel, palangre) los cuales no permiten grandes vol�menes de desembarques y tienen un efecto bastante limitado sobre los stocks. En el caso espec�fico de la flota que opera en el puerto de La Guira es m�s o menos especializada o definida en lo que se refiere a la pesquer�a de pargo Lutjanus spp, presentando caracter�sticas especiales debido a que utilizan embarcaciones con tonelaje y autonom�a de viaje. La mayor�a (41) son embarcaciones tipo pe�ero de 9 m de eslora que realizan campa�a de 8 a 10 d�as, hay adem�s naseras que realizan campa�as de 15 d�as. Por lo tanto, la pesquer�a de pargo se puede considerar como una pesquer�a artesanal avanzada. Estas embarcaciones se les denomina pargueras y capturan adem�s otras especies tales como cunaro y mero. Las artes de pescas utilizadas en esta pesquer�a generalmente son: el cordel, las nasas y el palangre obteni�ndose buenos resultados. Las faenas de pescan se realizan en horas diurnas debido probablemente a los h�bitos alimenticios de las especies. Los barcos arrastreros que operan al occidente zona central (Golfo Triste) tambi�n capturan especies distingui�ndose el pargo colorado ( L. purpureus), pargo dient�n (L. griseus), pargo (L. analis) y pargo guanapo (L. synagris) los constituyen un importante rengl�n en la pesca de arrastre. Como dijimos anteriormente, las mayores capturas reportadas por nuestra flota son de la especie L. purpureus (ver tabla), seg�n los datos reportados por las inspector�as de pesca de la regi�n, la captura de esta especie en particular se ha mantenido estable durante el per�odo 1979-1984, obteni�ndose un porcentaje de 7,4 % en 1979 y un 6,85 en 1984. En cuanto a la producci�n total de pargo en toda la regi�n central, observamos que se ha producido un incremento de la captura durante los �ltimos seis (6) a�os 1979-1984 (ver tabla). Es importante se�alar que pr�cticamente todo el pescado se consume en el litoral central es aportado por la flota artesanal costera. La flota desembarca y vende el producto de los puertos de desembarques ubicados en toda la zona. En estos puertos la producci�n es cedida a transportistas regionales, al p�blico en general, pescader�as y dep�sitos de pescado. Los precios del mercado representan por lo general m�rgenes bastante elevados, motivados a los innumerables eslabones de intermediarios ya la preferencia del consumidor por estas especies, cuyo precio oscila entre Es. 30 y 37 o m�s, siendo consumido, en su mayor�a como pescado fresco. En la zona central este recurso pesquero est� sujeto a una pesca de subsistencia, a pesar de la gran demanda en el mercado nacional e nacional, destac�ndose por el alto precio de comercializaci�n lo que la hace atractiva.
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