FONAIAP DIVULGA > Colección > Número  29   Julio-Septiembre  1988

  FONAIAP   DIVULGA  No.  29                                                                                                            Octubre-Diciembre    1988


La Langosta del Desierto
Schitocerca Gregaria (Forskal) en Venezuela

§ Ante la aparición en varias partes del país de langostas no conocidas, se ha hecho necesario estudiar este fenómeno, llegándose a determinar que se trata de la Langosta del Desierto, Schistocerca gregaria (Forskal). En este estudio, realizado conjuntamente por la Facultad de Agronomía de la Universidad Central de Venezuela y el Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias -Fondo Nacional de Investigaciones Agropecuarias, se presenta información acerca de su morfología, hábitos, biología y control, así como los detalles descriptivos para su reconocimiento.

Francisco Cerda; Ingeniero Agrónomo, M.Sc. Profesor Universidad Central de Venezuela. Instituto de Zoología Agrícola.
Mario Cermeli; Ingeniero Agrónomo, Ph. D. Investigador V. Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias. Maracay. 


Las langostas son plagas muy destructivas, conocidas desde épocas remotas. El Antiguo Testamento las menciona como una de las ocho plagas de Egipto. En África, Medio Oriente y la India, se caracterizan por reproducirse en grandes cantidades en ciertas áreas, cuando las condiciones ambientales les son favorables, para de allí desplazarse en grandes bandadas a otras regiones, atacando y destruyendo los cultivos y la vegetación que encuentran a su paso, causando hambrunas en extensos territorios. Una reciente invasión en Somalia se calculó en 1.6 x 100 individuos que pesaban un total de 50.000 toneladas. Conociendo que cada langosta come el equivalente a su peso por día, nos da una idea del daño que pueden ocasionar. 

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Fig. 1 Ejemplar adulto de la  langosta del desierto

Entre las especies que revisten mayor importancia en el continente africano se encuentra la langosta del desierto, Schistocerca gregaria (Forskal), la cual tiene su zona de cría en la franja que bordea el desierto de Sahara y la Península de Arabia. En Venezuela, los ataques de langostas se conocen desde la época de la Colonia. Dos grandes invasiones se registraron más recientemente entre los años de 1881 a 1885 y 1913 a 1918, produciendo daños de tal magnitud a la agricultura, que en ambas oportunidades el gobierno declaró estado de emergencia nacional. Las especies de langostas americanas causantes de estos daños pertenecen, en su mayoría, al género Schistocerca Stal. 

Presencia de la langosta del desierto en el Continente Americano 

En el mes de octubre de 1988, se reporta la invasión de langostas no conocidas en varias islas del Caribe y Surinam. En el mes de noviembre del mismo año, se reporta una invasión semejante en varias localidades del estado Sucre, inicialmente en Río Caribe. Un estudio detallado de los ejemplares colectados en dicha zona demostró que éstos pertenecían a la langosta del desierto. posteriormente, fueron colectados ejemplares de la misma especie en los estados Aragua, Carabobo, Distrito Federal, Falcón, Miranda y Monagas. Su llegada al continente americano se relaciona con las corrientes de aire producidas por el desplazamiento del huracán Joan, el cual se originó cerca de las costas del oeste de África y afectó a las Antillas Menores, Trinidad y las costas del norte de Sur América; incluyendo a Venezuela. 

Presencia de la langosta del desierto en Venezuela y sus implicaciones 

La información obtenida hasta el presente de los países del Caribe que han reportado la presencia de la langosta del desierto, coincide en gran parte con lo observado en el país y nos hace pensar que no representa un peligro inmediato para nuestra agricultura, Esto se deduce de las características de los invasores que llegaron a nuestras costas: adultos sexual mente inmaduros, muy debilitados y poco activos. En caso de madurar y aparearse deben encontrar las condiciones climáticas y ecológicas necesarias para su reproducción y muy  triplicación. Estas áreas deberían tener características similares c las de su lugar de origen. 

Ante el peligro potencial de que esto ocurra en el país, se hace necesario que tanto las instituciones públicas y privadas, as como los productores y público en general, colaboren en efectuar un seguimiento del insecto en todo el territorio nacional paro recabar información sobre la distribución, densidad, cultivo afectados, intensidad del daño presencia de enemigos natura les y aparición de formas juveniles o saltonas y adultos. 

En el presente artículo se describen las características de la langosta del desierto y su ciclo de vida; se comparan estas características con las especies nativas por medio de una clave pictórica, con el fin de facilitar su  identificación. 

Descripción y reconocimiento 

La langosta del desierto, Schistocerca gregaria (Forskal), pertenece a la familia Acrididae del orden Orthóptera y se caracterizo por ser un insecto de cuerpo alargado, con un tamaño aproximado de 6 a 8 cm de largo desde la cabeza hasta el ápice de las alas en su forma adulta. (Fig.1)  

La coloración general es variable: en su fase solitaria es de color marrón, grisáceo o amarillento, a veces verdoso; en oportunidades presenta bandas longitudinales más claras en la parte anterior del cuerpo. En su fase gregaria, como las que recién llegaron al país, son de color rosado, pasando luego a amarillo al alcanzar su madurez sexual si encuentran condiciones apropiadas para su reproducción. El la parte ventral, entre las pata: anteriores presenta una protuberancia o saliente en forma dE espina vertical ligeramente inclinada hacia atrás y con el ápice redondeado. Las alas anteriores tienen manchas oscuras de forma irregular y las alas posteriores son transparentes. Las pata posteriores son muy desarrolla das, adaptadas para saltar y tienen la misma coloración genera del cuerpo en su cara externa. En Venezuela existen varias especies de langostas muy parecidas a la langosta del desierta con la cual se pueden confundí fácilmente, y que además sor muy variables en tamaño y coloración. Por esta razón, a veces no es fácil diferenciarlas, pero par. la mayoría de los casos el siguiente esquema, basado en tal forma de la espina ventral entre las patas anteriores y en el patrón de coloración de las patas posteriores, puede ayudar a reconoce a la langosta del desierto y diferenciarla de las langostas venezolanas  (Fig. 2)

Las formas juveniles no pose el alas desarrolladas, y son generalmente de color verde amarillento o marrón claro cuando crecen en forma solitaria, muy parecidas a las especies venezolanas. Si llegan a desarrollar e hábito gregario (en grupos muy grandes y numerosos) entonces la coloración cambia a marrón negruzco con manchas de color amarillo. 

Biología y hábitos

Las hembras adultas ponen los huevos en el suelo, preferiblemente arenosos o sueltos, para lo cual cavan un hoyo de unos 6-7 cm de profundidad con el ápice del abdomen. 

Las posturas consisten en grupos de 80 a 100 huevos de forma alargada y color marrón, unidos o pegados entre sí. Si hay suficiente humedad en el suelo y alta temperatura, a los 10-12 días emergen las primeras crías conocidas como saltonas, las cuales sufren cinco mudas hasta alcanzar su forma adulta (con sus alas totalmente desarrolladas) aproximadamente a los 30-60 días dependiendo de la temperatura. El adulto puede vivir varios meses. 

Tanto las saltonas como los adultos se pueden alimentar de una gran variedad de plantas, incluyendo la mayoría de los cultivos y muchas plantas silvestres como gramíneas y leguminosas y aun grandes árboles como samanes y bucares. Ellas son a su vez atacadas y devoradas ávidamente por pájaros y aves domésticas, cotejos, avispas y por otros insectos beneficiosos. 

Control

Las medidas de control sólo se justifican cuando se presenta la fase gregaria, es decir, cuando la langosta se reproduce en grandes cantidades en un área definida. Como aquí no se ha presentado en estas condiciones, no se pueden hacen recomendaciones al respecto. 

El control se puede efectuar con productos químicos utilizado en aspersiones o bien en forma de cebos. Los productos a utilizarse dependen de la falla del insecto a controlarse y la cercanía de la infestación a zonas pobladas. 

Los productos más efectivos contra los adultos son: Fenitroion, Diazinon y Malathion. También existe un cebo extraído de un protozoario (Nosema locustae) Canning, el cual debería probarse en esta especie.