FONAIAP DIVULGA > Colección > Número  32   Julio-Diciembre  1989

  FONAIAP   DIVULGA  No.  32                                                                                                                  Julio-Diciembre    1989


Materias Primas Alternativas Para la Producción  de Alimentos Concentrados  para Animales en Venezuela
II. Fuentes  Proteicas

Alicia M. León, Iván  Angulo
Ingeniero Agrónomo, M.Sc. Investigador II. Nutrición Animal. FONAIAP -CENIAP. Instituto de Investigaciones Zootécnicas. Maracay. 

Médico Veterinario, M.Sc. investigador IV. Tecnología de la Carne. FONAIAP -CENIAP. Instituto de Investigaciones Zootécnicas. Maracay. 


II. FUENTES PROTEICAS

  Torta de algodón: Es un producto de cultivo tradicional de las regiones tropical y subtropicales de Asia y América. Su uso está limitado en la alimentación animal por la presencia del factor antinutricional Gosipol. El producto, desprovisto de sustancias tóxicas tiene una calidad próxima a la torta de soya. Al respecto, el Fondo Nacional de Investigaciones Agropecuarias (FONAIAP) trabaja en la selección de variedades sin glándulas, provenientes del Banco Interamericano de Germoplasma del ICRISAT. 

  La composición química de la torta indica un contenido proteico de 40- 45%, lisina 1,7% y metionina + cistina 1,24%. El valor de energía metabolizable determinado en aves varía entre 1800 y 2000 Kcal/ kg de materia seca. 

  El nivel de inclusión en dietas para pollos y pollonas varía entre 5 y 10%. Su uso es limitado en ponedoras por inducir moteado de yema. Por su contenido de fibra este producto ha sido más utilizado en la alimentación de bovinos de leche. 

  Torta de maní: Presenta un valor nutricional variable según el método de extracción del aceite (presión y tratamiento por solvente). El nivel de esta torta en celulosa es moderado. (5- 7%), el contenido de proteína varía entre 41 y 46%, lisina 1,7% y metionina + cistina l, 18%. Destaca su valor de energía metabolizable del orden de 2650 Kcal./Kg. de materia seca. Las tortas de maní son susceptibles a contaminación por hongos, entre los cuales el más conocido es Aspergillus flavus. Sólo las tortas que contienen menos de 1 ,25 Mg./Kg. de aflatoxinas pueden ser utilizadas en las alimentación animal. Esto representa un grave problema para la mayoría de países tropicales, donde las condiciones de almacenamiento son inadecuadas. 

  Su utilización para las aves no presenta dificultades cuando son incorporadas en las dietas, hasta un nivel de 30% para animales en crecimiento y 20% en animales adultos. 

  Tortas de ajonjolí y girasol: La torta de ajonjolí puede utilizarse en raciones para aves, resolviendo sus dos limitantes principales: a) es deficiente en lisina y b) el calcio que contiene en elevado porcentaje (2%) es pobremente utilizado, por lo tanto, cuando es incorporada a las raciones en porcentajes elevados, debe aumentarse el contenido de calcio total más allá de los requerimientos para asegurar el mínimo requerido de calcio asimilable. Por otra parte, también se ha encontrado que tiene una notable capacidad para bloquear la disponibilidad de zinc. 

  Su contenido de proteína promedio es de 42%, siendo una buena fuente de arginina y leucina. El valor estimado de energía metabolizable es de 2560 Kcal./Kg. en materia seca, sin embargo, su composición Química y valor nutritivo puede variar dependiendo del método y las condiciones de extracción del aceite. 

  Su uso práctico de inclusión en las dietas para monogástricos varía entre 10 y 15 por ciento. 

  La torta de girasol contiene proteínas de una elevada digestibilidad, pero son deficientes en lisina. Por el contrario, su contenido de metionina es bastante alto. Su nivel energético es medio (2600 Kcal./Kg. en materia seca), por lo cual, cuando se utiliza normalmente de forma preferente en los alimentos destinados a reproductoras adultas, deben cubrirse sus deficiencias en energía y lisina. Carece de sustancias tóxicas y su mayor problema es la variabilidad que presenta su calidad, la cual depende en gran manera del descorticado que se realice. 

  Subproductos de origen animal: El valor de los alimentos de origen animar, para mejorar las calidades nutritivas de las raciones de los monogástricos, es bien conocida. Los alimentos de origen animal pueden aportar los elementos faltantes de las mezclas de cereales y otros productos vegetales, y por este motivo, estos productos pueden mejorar mucho el valor nutritivo de la ración total. Rara vez se usan estos residuos en rumiantes, por su  alto costo y porque, debido a la presencia de la microflora ruminal, normalmente no se requiere vitamina B. 

  La oferta de los subproductos de origen animal en Venezuela es irregular e inconstante. El contenido de sustancias nutritivas generalmente es variable y distintas muestras del mismo producto pueden diferir notablemente. En el Cuadro 4 se presentan las normas dictadas por COVENIN para los residuos de mataderos. 

  La harina de carne se elabora de los residuos de los cortes, generalmente, después que se ha extraído la grasa. Para evitar la propagación de enfermedades, estos residuos deben someterse a la acción de la temperatura por lo menos durante una hora. Normalmente, la harina de carne se utiliza en niveles inferiores al 5% en las raciones para cerdos en crecimiento y acabado, y menos de 10% en raciones para cerdas gestantes y aves de corral.

   Las harinas de huesos se utilizan principalmente como fuentes de calcio y fósforo, pero su contenido de proteína y materias energéticas no debe despreciarse en la preparación de alimentos. 

  En Venezuela no existen industrias productoras de harina de pescado para animales, tales como las de Perú o Chile. 

  Todas las clases de peces se utilizan para consumo humano o para la fabricación de enlatados. Estas fábricas venden a las empresas productoras de alimentos para animales los residuos, consistentes en cabezas, rabos, huesos, escamas y entrañas del pescado. No se conoce a ciencia cierta la cantidad y calidad del producto en el país. 

  La cantidad a añadir se recomienda hasta 10% en alimentos iniciadores de pollos y menos de 5% para raciones terminadoras y de postura, en cerdos, un empleo corriente es de 7%. Hay que tener en cuenta que la posible presencia de aceite en la harina puede dar a la carne o a los huevos un sabor a pescado. 

  Los subproductos de mataderos de aves son la combinación de todos los subproductos avícolas. La harina cuya caracterización general no es posible, dado que depende de las proporciones de sus integrantes, da resultados satisfactorios mezclada en alimentos para aves a niveles hasta de un 5- 6 por ciento. 

  Tortas de palmiste y copra: Subproductos de la extracción de aceites. Las tortas tienen un contenido de proteína que varía entre 18 -22%. El nivel de fibra es generalmente alto (15 -16%), los contenidos de lisina (0,66%) y de metionina + cistina (0,63 - 0,70%) son relativamente bajos. 

Cuadro 4. Requisitos específicos para residuos de matadero, según las normas de COVENIN. 

Contenido

Harina de hueso

Harina de carne

Harina de sangre

Harina de carne y hueso 40% prot. 50% prot.
                        

Humedad

7.0

10.0

8.0

10.0

10.0

Proteína cruda (mínima)

18.0

50.0

80.0

44.0

50.0

Proteína cruda (máxima)

3.0

8.0

1.0

10.0

8.0

Fibra cruda

1.5

2.0

1.0

3.0

2.0

Cenizas insolubles en ácidos (máximas)

1.0

2.0

1.5

2.0

2.0

Calcio (mínimo)

22.0

_

_

_

_

Fósforo (mínimo)

10.0

_

_

_

_

Cenizas totales (máximo)

_

26.0

4.5

_

_

Digestibilidad proteína (mínimo)

_

90.0

98.0

80.0

90.0

Amoníaco libre

150 Mg./100 g MS

  Su utilización está limitada en raciones para aves a niveles del 10%. La investigación en el país sobre estos subproductos en la alimentación animal, es escasa. 

  Concentrados de follajes: Venezuela y el trópico presentan ventajas agroecológicas en la producción de proteínas en función de una fotosíntesis permanente que permite, a partir de elementos primarios disponibles (energía solar, agua y nitrógeno), sintetizar aminoácidos. 

  La parte aérea de las plantas de yuca y de Leucaena leucocephala aparecen como una de las mejores alternativas para la producción de concentrados foliares. 

  Los concentrados proteicos son productos de un elevado valor nutricional. En el caso del concentrado de leucaena su contenido es de 60% con un valor adicional como pigmentante derivado de su contenido de xantofilas totales (3000 Mg./Kg.). Sin embargo, el alto costo de extracción de estas proteínas ha limitado su utilización expansiva en la alimentación animal. 

  Leguminosas de grano: Las leguminosas de grano aportan los aminoácidos que escasean en los cereales. Las semillas suelen contener más de 23% de proteína cruda, con un apropiado balance de aminoácidos y un importante valor energético. 

  En Venezuela son de explotación corriente el fríjol (Vigna sinensis) y el quinchoncho (Cajanus cajan) y de potencial producción la Canavalia ensiformis y el Psophocarpus tetraglonobus (fríjol alado). Un aspecto común a estas cuatro leguminosas, es su adaptabilidad al medio tropical venezolano y su alto potencial productivo, comprobado en otros países tropicales (Cuadro 5). 

  La Canavalia ensiformis presenta un rendimiento del orden de los 3000- 4000 Kg./ha. El contenido de proteína de la semilla es de 18- 30%, con un perfil de aminoácidos muy similar al de la soya. El valor de energía metabolizable de los granos tratados (extrusión} varía entre 2800- 3000 Kcal./Kg. en materia seca. 

  El nivel de incorporación en las dietas está limitado a no más del 10%, debido, fundamentalmente a la presencia de factores antinutricionales. Sin embargo, en la medida que avancen los estudios sobre tratamiento tecnológico de los granos, este nivel de inclusión podrá ser aumentado considerablemente. 

  El fríjol alado es una leguminosa tropical de origen asiático, presenta una composición química similar a la de la soya, con un contenido de proteína de 34% y 16% de materia grasa. Presenta factores antinutricionales como todas las leguminosas. Las semillas sometidas a cocción e incorporadas en el alimento con suplementación de metionina, producen una mejora de los parámetros productivos de los animales. 

  El quinchoncho (Cajanus cajan) contiene entre 24 y 28% de proteína, con un buen balance de aminoácidos. Variedades mejoradas del FONAIAP e introducidas de la India, producen rendimientos de hasta 6 Tm./ha. La otra gran ventaja del cultivo es la mecanización de la cosecha. Su uso hasta ahora ha sido limitado al consumo humano. Al igual que para el fríjol alado, poco se conoce sobre su utilización como ingrediente de alimentos para animales. No obstante, su gran potencial de producción y sus excelentes características nutricionales le hacen apropiado para estos fines. 

  En consecuencia, la investigación en el FONAIAP se orientará a generar los conocimientos necesarios para establecer sus niveles de inclusión en las dietas para animales.

Cuadro 5.

Leguminosas

Proteínas cruda (%) 

Extracto etéreo (%)

Energía metabolizable (Kcal./Kg.) 

Cerdos  

Aves

Soya

37,0

18,0

3,25

3,15

Canavalia

29,2

3,2

2,90

2,80

Frijol alado

33,7

16,5

3,05

3,00

Quinchoncho

23,5

1,2

2,75

2,69

Frijol  (caupí)

26,0

1,4

2,80

2,70