FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 37   Julio-Septiembre  1991

  FONAIAP   DIVULGA  No.  37                                                                                                               Julio-Septiembre    1991


La Mosca  Blanca (Bemisia Tabaci) en Venezuela

La mosca blanca (Bemisia tabaci Gennadius) viene causando pérdidas económicas en no pocos cultivos importantes, siendo necesario su estudio y la profundización de su control con el fin de disminuir sus poblaciones. En este sentido el presente trabajo ofrece aspectos relacionados con su identificación, cultivos atacados y hospederos, evaluación de insecticidas, enemigos naturales y alternativas de control.

Eustaquio Arnal A., Eduardo Debrot, Mario Cermeli, Fidel A. Ramos CH.,  Amado Rondón

FONAIAP -Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias. 
Instituto de Investigaciones Agronómicas.


   El insecto Bemisia tabaci Gennadius, Homóptera: Aleyrodidae, conocido comúnmente como mosca blanca, es una plaga de importancia económica en diferentes cultivos de Venezuela, así como de otros países tropicales y subtropicales.

   El ciclo de vida es de un mes aproximadamente sobre la maleza Blumea viscosa Mili Badillo de la familia Compositae, en el mes de diciembre, Maracay, Estado Aragua. Sin embargo, es altamente dependiente de la temperatura, ya que a bajas temperaturas el ciclo de vida se puede alargar más de 60 días, mientras que a altas temperaturas, se acorta a 20 días aproximadamente. Sus colonias se ubican en el envés de las hojas, en diferentes estados de crecimiento: huevo, cuatro estados ninfales, pupa y adulto (Figura 1). Posee un aparato bucal del tipo perforador-chupador, que le permite chupar savia de las plantas y transmitirles enfermedades virales, principalmente las causadas por geminivirus (Mosaico amarillo del tomate, caraota; soya, papa, el virus del grupo en tabaco, entre otros). Cuando el insecto alcanza altas poblaciones debilita las plantas atacadas y puede causarles la muerte; su excremento azucarado "melao" sirve de sustrato para el crecimiento de hongos (Cladosporium sp.) sobre hojas y frutos, dificultando la fotosíntesis y causando depreciación del producto a cosechar. Las altas poblaciones han causado pérdidas millonarias en los Estados Araguá, Carabobo, Cojedes, Guárico, Monagas, Portuguesa, Lara, Zulia y Falcón, en los siguientes cultivos: tomate, caraota, papa, melón, pepino, tabaco, patilla, ajonjolí, girasol, soya, berenjena, otros.

   Con el fin de determinar sus plantas hospederas y estudiar algunas alternativas de control, se realizó un reconocimiento de moscas blancas y sus enemigos naturales en diferentes localidades del país. Además, se evaluaron insecticidas en ensayos ubicados en siembras comerciales de los Estados Falcón y Guarico. En Venezuela, el reconocimiento de moscas blancas ha determinado la existencia de 19 géneros con 25 especies determinadas y 11 no determinadas, criándose en plantas pertenecientes a 27 familias botánicas. Los especimenes identificados se conservan en el Departamento de Protección Vegetal del Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias, Maracay, Estado Aragua. S. tabaci, ha sido colectada, criándose en los hospederos siguientes: papa, caraota, tomate; melón, patilla, pepino, soya, tabaco, berenjena, algodón, fríjol, ajonjolí, girasol, yuca, repollo, lechuga, col de bruselas y calabacín, y en 35 especies de malezas de las siguientes familias botánicas: Leguminosae, Euphorbiaceae, Gompositae, Malvaceae, Cucurbitaceae, Solanaceae y Amaranthaceae. Las especies han sido debidamente identificadas, con la colaboración del Instituto dé Botánica de la Facultad de Agronomía, UCV. El reconocimiento de moscas blancas ha contado con la valiosa colaboración de la doctora Louise M. Russell, especialista en moscas blancas, del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).

   En el segundo semestre del año 1990 y primer semestre de 1991 se evaluaron insecticidas de diferentes grupos químicos en distintas localidades; en Tocuyo de la Costa (Estado Falcón) se evaluaron los insecticidas recomendados para mosca blanca con base en los siguientes tratamientos: T1 = Cymbush (= Cipermetrina) + adherente (= Cytowettplus) a los 15 días de germinado el cultivo; T2 = Actellic (= Metil Pirimifos) + aceite blanco (= aceite mineral), aplicados a los 15 días de germinado el cultivo y cuatro semanas después se asperjó el insecticida Oecis (=Oeltametrina) combinado con el adherente; T3 = Salut (= Clorpirifos + Dimetoato) combinado con aceite blanco, aplicados a los 15 días de germinado el cultivo y cuatro semanas después Thionil (= Endosulfán) + adherente; T 4 = Karate(Lambdacyalotrina) + Surfactante; T5 = testigo. En San José de Tiznados (Estado Guarico) se evaluaron los insecticidas siguientes: Supermetrina (= Cipermetrina), Brigade (= Bifentrina), Fastac (=Alfacipermitrina), Thionil (= Endosulfán), Ambush (= Permetrina) y Tamarón (= Metamidofos). Cada semana se colectaban tres hojas (joven, intermedia y madura) de una planta escogida al azar en cada parcela. Las muestras se trasladaban refrigeradas al laboratorio donde se procedía a contar las diferentes fases de desarrollo del insecto. No se encontraron diferencias significativas entre los tratamientos. En San José de Tiznados, las poblaciones de moscas blancas superaron grandemente las encontradas en Tocuyo de la Costa.

   En el mes de julio de 1991 se evaluaron en El Tuque (Estado Falcón) cinco insecticidas: Roten plus (= Rotenona 8% + Cipermetrina 4%), Bigade (= Bifentrina), Dominey (=Alfacipermetrina), Zimgard (Cipermetrina + Deltametrina) y Thionil (= Endosulfán). Tampoco se encontraron diferencias significativas entre los tratamientos, pero sí se encontraron diferencias con el testigo. Los menores 'niveles poblacionales se encontraron con los insecticidas Brigade, Roten plus y Endosulfán. Los cuales pueden ser utilizados en un programa de rotación de insecticidas previo monitoreo de las poblaciones del insecto.

   Entre los enemigos naturales de moscas blancas encontrados se citan: Encarsia sp., Hymenóptera: Aphelinidae (parasitoide), Chrysopa sp., Neuróptera: Chrysopidae, arañas no determinadas y hongos entomógenos; entre éstos el más importante es Verticillium lecanii. Para el control del insecto es recomendable aplicar algunas estrategias de manejo integrado de plagas, tales como: evitar siembras escalonadas de cultivos susceptibles a la mosca blanca, rotar cultivos, eliminar plantas igualmente susceptibles, evaluar las malezas y plantas silvestres para decidir sobre su control, eliminar socas, realizar reconocimiento sobre enemigos naturales, decidir sobre períodos de veda. El control químico con insecticidas debe hacerse con asesoramiento técnico que garantice el monitoreo de las poblaciones del insecto y se recomienda la aplicación de insecticidas con adherentes por el envés de las hojas en un programa de aspersión, variando el grupo químico en cada tratamiento.

   A nivel mundial, para bajar las poblaciones y disminuir las pérdidas, se ha recomendado el uso de Dimetoato + aceite blanco, Piretroides, aceites minerales y Endosuslfán con monitoreo antes y después de las aplicaciones. En los ensayos realizados por el Departamento de Protección Vegetal del CENIAP en Tocuyo de la Costa (Estado Falcón), San José de Tiznados (Estado Guárico) y El Tuque (Estado Falcón), se pudo manejar exitosamente las poblaciones del insecto en siembras comerciales de melón, evitando las pérdidas significativas de cosecha que normalmente causa la mosca blanca.

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Adulto de la mosca

Daño  causado por la mosca