FONAIAP DIVULGA > Colección > Número  38   Octubre-Diciembre  1991

  FONAIAP   DIVULGA  No.  38                                                                                                            Octubre-Diciembre    1991

Recomendaciones Practicas para el Control de la Paja Cabezona en la
 zona del bajo Tocuyo (Edo. Falcón)

Carlos Romero.

    Como parte del Proyecto Aroa-Bajo Tocuyo, orientado al estudio de los sistemas de producción de ganadería de doble propósito, se han detectado en las actividades relacionadas con el manejo de pastos, problemas de invasión de potreros por la paja cabezona (Paspalum virgatum). En este artículo se presentan diversos aspectos relacionados con la condición de maleza de esta especie y su capacidad invasora de potreros, así como recomendaciones para su manejo integrado mediante prácticas agronómicas (uso de rotativa, fertilización y control de malezas), las cuales permiten recuperar exitosamente los potreros invadidos por la paja cabezona. 


Descripción de la paja cabezona 

    Es una gramínea perenne de crecimiento muy vigoroso en forma de macollas erectas, que alcanzan hasta 1 ,5 m de altura; las hojas se tornan ásperas y con bordes cortantes a medida que la planta tiene más edad; produce una inflorescencia en forma de panícula (Foto 1) con muchas semillas viables, lo cual facilita su reproducción. Se desarrolla fácilmente en suelos de baja fertilidad, como comúnmente se las encuentra en la zona del Bajo Tocuyo. 

    Ha sido reportada como una especie natural de zonas bajas de los andes venezolanos y se encuentra diseminada en casi todos los países de América Tropical y Australia. Fue introducida en el área del Bajo Tocuyo (eje Boca de Aroa-Yaracal-Mirimire) por medio de la siembra de macollas en los taludes de la carretera nacional Morón-Coro, luego por su gran capacidad de reproducción a través de semillas, se propagó rápidamente a los potreros adyacentes para desde allí, continuar su expansión hacia otras áreas, básicamente por diseminación natural (semillas), ayudada por los animales (heces) y el sobrepastoreo de los pastizales. 

¿Por qué es considerada como una maleza? 

    Se discute, a nivel de técnicos y productores, si la paja cabezona es maleza o pastizal utilizable por los animales. En observaciones de campo se ha comprobado la utilización de la misma por los animales, pero corresponde casi siempre a etapas tempranas de crecimiento; es decir, cuando los rebrotes están bastante tiernos. En estas condiciones es consumida aceptablemente e inclusive constituye el pastizal básico en algunas explotaciones dedicadas a la ceba. Este uso involucra un manejo muy rápido e intensivo, ya que las hojas, en la medida que envejecen, se tornan ásperas con el borde aserrado y disminuye la aceptación por el ganado; además es posible sólo en potreros cubiertos exclusivamente por la paja cabezona, puesto que al existir otro pasto como guinea, estrella, etc., los animales prefieren estos últimos, con el consiguiente deterioro del pastizal y el incremento de la maleza al no tener la competencia del pasto. 

1. Planta de paja cabezona donde resalta la inflorescencia en forma de panicula. 

Causas de la invasión y de la proliferación de la paja cabezona 

 Esta maleza ha poblado en pocos años una gran cantidad de potreros, debido a: 

-Gran agresividad y velocidad de crecimiento, principalmente en suelos de baja fertilidad.

-Rusticidad de las hojas, que la hacen poco palatable. 

-La selectividad de los animales que al preferir los pastos (guinea, estrella, etc.) disminuyen la cobertura del pastizal, reducen la competencia, obteniendo así la maleza, mayor espacio, luz y nutrientes para su crecimiento.

-Uso inadecuado de medios de control mecánico, principalmente por el uso de la rotativa sola y en un potrero altamente infestado, resulta contraproducente el uso de este implemento por cuanto la poda o corte favorece la proliferación de rebrotes vigorosos, tal como se observan en la Foto 2. 

-El retardo en el control permite que la planta cumpla su ciclo vital, produciendo y liberando una gran cantidad de semillas que son fértiles y/o pueden permanecer mucho tiempo en el suelo sin perder su capacidad de germinación. 

-Poca adaptación y persistencia de las especies y/o cultivares de pastos utilizados que le dan a éstos poca capacidad de competir exitosamente en su establecimiento y mantenimiento posterior. 

El resultado evidente en un pastizal  invadido por la cabezona es la pérdida de calidad y cantidad nutricional; es decir, ofrecerá un pasto en malas condiciones y en poca cantidad de material vegetal. 

Manejo integrado de la paja cabezona 

     En el marco del proyecto Aroa- Bajo Tocuyo, bajo el enfoque de sistemas y la investigación  y desarrollo, se han detectado las limitantes agroecológicas y de manejo en las fincas bajo estudio. Entre esas limitantes figura la invasión de malezas como un serio problema, ya que reduce enormemente la capacidad de sustentación de los pastizales cultivados. Para enfrentar esta situación se analizan diferentes formas de manejo y control de la maleza paja cabezona, se inicia una serie de ensayos que conducen a la introducción del concepto manejo integrado, en el cual se combina un grupo de técnicas y prácticas agronómicas conocidas, pero que hasta ahora venían siendo usadas de manera aislada. Estas prácticas son: el uso de rotativa,  herbicida y  fertilización; se trata no sólo de controlar la maleza sino de darle al pastizal mejores condiciones de fertilidad y espacio para su normal crecimiento. 

     Los resultados de estos ensayos muestran que la combinación de estas prácticas logran un efectivo control de la paja cabezona; el pastizal adquiere mayor vigor de crecimiento y se mejora la calidad del pastizal (Foto 3). 

Para recuperar potreros, donde la invasión por la maleza no sea total, se recomienda: 

     Cuando el potrero esté totalmente invadido por la paja cabezona, se recomienda establecer de nuevo el pastizal, aplicando arado, rastra, fertilización y siembra. 

-Someter al potrero a pastoreo, luego hacer un pase de rotativa o machetear los manchones de paja cabezona. 

-Al cabo de dos o tres semanas aplicar a los rebrotes de la maleza mediante asperjadora de espalda o aplicador de bastón una solución de herbicida sistémico (Round-up) o cualquier otro específico para el control de gramíneas. 

-Al observar un amarilleo de estos rebrotes, aplicar fertilizante a todo el potrero. El tipo de abono y la dosis dependerá del suelo, por lo que es necesario realizar el análisis respectivo. Como norma general, para mayor efectividad de estas prácticas, es importante que exista una buena humedad en el suelo, porque de lo contrario se reduce la acción del herbicida y el fertilizante no puede ser absorbido adecuadamente por el pastizal. 

(continúa en la página 34) 

2. Nótese el desarrollo de la maleza en un pastizal, donde sólo se hizo un pase de rotativa. 

 

3. Detalle del control de la maleza por el herbicida y aliado, el crecimiento rápido del pasto estrella fertilizado

Medidas preventivas para evitar la invasión de esta maleza 

En fincas donde el problema no es muy serio o no hay invasión, es necesario seguir algunas normas para contrarrestar o evitar la entrada de la maleza. Entre otras podemos citar: 

-Someter a cuarentena en un solo potrero a los animales recién incorporados a la finca, con el objetivo de impedir la diseminación de semillas de malezas contenidas en las heces.

-Impedir el desarrollo y proliferación de la maleza, eliminando las plantas o manchones de Continuación del artículo sobre el ácaro de la Caña de Azúcar plantas que se observan diseminadas en los potreros, antes que produzcan semillas. 

-Eliminar las plantas de la maleza que se encuentran en los alrededores o periferia de la finca, con la finalidad de evitar la entrada de semillas. 

-Limpiar los implementos agrícolas (rotativa, arado, rastra, rolo argentino, ruedas de tractor, etc.) antes de utilizarlos.