FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 39   Enero-Marzo  1992

  FONAIAP   DIVULGA  No.  39                                                                                                                        Enero-Marzo   1992


Enfermedades Fungosas de los Cítricos

El avance de la citricultura nacional motiva cada vez más a los productores hacia la adopción de tecnologías que protejan sus plantaciones más allá de las cosechas. Una de ellas es el control de enfermedades fungosas, cuya propagación puede ocasionar severos daños y, en consecuencia, pérdidas económicas. En este artículo se describen las principales enfermedades fungosas registradas y sus respectivos controles, útiles en gran medida para la consolidación de las plantaciones. Finalmente, se presenta el cuadro de árboles copa 'Valencia' sobre patrón 'Cleopatra " muertos por hongos y se aportan las recomendaciones a adoptar en una situación semejante.

Amado Rondón
Investigador FONAIAP-CENIAP-IIA, Maracay


Dentro de los frutales que se cultivan en Venezuela, las cítricas ocupan un lugar importante como consecuencia del incremento en el consumo fresco y debido a los crecientes volúmenes procesados por la agroindustria. Este hecho ha despertado el interés de muchos productores por aumentar la superficie de siembra, aplicando diversas prácticas agronómicas que van desde el vivero hasta las plantaciones comerciales, con la finalidad de mejorar la producción y productividad por hectárea. En este sentido, las enfermedades constituyen la dificultad más grande a vencer en las explotaciones citrícolas, especialmente las introducidas por virus y hongos del suelo.

 ENFERMEDADES   DEL  SEMILLERO  Y   VIVERO

Las enfermedades en el semillero, son ocasionadas por hongos del suelo: Rhizoctonia sola ni Kühn, Pythium spp., Fusarium spp. y Phytophthora parasitica Dastur. Los síntomas van desde la pudrición de la semilla hasta el amarilleo y secamiento de las plántulas. Un control eficiente incluye la desinfección del suelo por calor; la prevención de la contaminación por el agua, asegurándose que la fuente sea pura o, en caso contrario, tratarla con 200 ppm de sulfato de cobre, y, por último, usar herramientas limpias, desinfectadas con formalina 5% o hipoclorito de sodio al 3 por ciento. 

Las enfermedades que atacan en el vivero son: marchitez por P. parasitica y Fusarium spp.; cercosporiosis por Cercospora aurantia Heald y Wolf; verrugosis por Sphaceloma fawcetti Jenkins; antracnosis por Col/etotrichum gloeosporioides (Penz) Sacc; mancha aureolada por Pel/icularia filamentosa (Pat) Rogers y muerte regresiva por Botryodiplodia theobromae Pat., La sintomatología de estas anomalías se manifiestan desde manchas en el follaje, cancros, áreas muertas en tallos y ramas, hasta la marchitez de la planta por la destrucción de las raíces o de tejido del cuello (Figura 1).

Figura 1. Hojas de naranjo california (Cítrus sínensls Obs.) afectado por el hongo Phytophthora parasítica Dast.

 

El control más eficiente es desinfectar el suelo de las bolsas con calor (vapor de agua), recolectar y destruir las hojas afectadas. Si es necesario, aplicar productos como: Benlate (1 g/l), Cupravit (2 g/l) o Dithane M-45 (2 g/l), los cuales deben mezclarse con un adherente (Supersticker, surfactante HA o Citowett).

 ENFERMEDADES DE LAS RAÍCES, TRONCO  Y  RAMAS

Pudrición del pie o gomosis

El agente causal de la enfermedad en las regiones tropicales es el hongo P. parasitica, cuya sintomatología se manifiesta en la base del tronco y raíces principales, en forma de zonas muertas de la corteza que pueden agrietarse, exudando goma; en el leño, se observan manchas pardas e invasión gomosa del cambium. Organismos secundarios penetran en las lesiones y determinan la muerte del xilema o causan la podredumbre seca de la raíz. La reacción de los cultivares cítricos varía desde una gran susceptibilidad, como es el caso de los limeros y naranjos; moderada resistencia, como en el caso de la mandarina 'Sunki', Citrus amblycarpa, 'Citremón 1499' y de gran resistencia como 'Cintrange carrizo', Swinglea glutinosa y 'Citrange troyer'. La enfermedad es más frecuente en regiones con suelos pesados, mal drenados y con elevada precipitación, ya que el hongo penetra a través de las heridas en la corteza sana. La temperatura ambiental alrededor de 25 a 30°C favorece el crecimiento y desarrollo del hongo.

Control: deben aplicarse medidas preventivas tales como: uso de patrones resistentes; injertar alto por encima de los 30 a 40 cm del suelo; no plantar cítricos en suelos pesados y mal drenados; impedir heridas en el tronco y raíces principales del árbol; evitar hacer pocetas alrededor del tronco para no exponer el pie del árbol a humedad constante; no enterrar demasiado las plantas al transplantar, porque se pierde el beneficio de injertar alto; pintar los troncos con pintura de caucho mezclada con un fungicida; pulverizar con caldo Bordelés u otro fungicida apropiado el tronco, ramas principales y el terreno alrededor del árbol, una vez al año, en plantas adultas, o cada seis meses en plantas jóvenes.

Las medidas curativas solamente se justifican cuando el daño está comenzando y el tratamiento consiste en cortar con navaja o cuchillo las pequeñas lesiones y raspar la parte enferma hasta observar tejido sano. Inmediatamente, con una brocha, aplicar permanganato de potasio y pasta bordelesa cuando haya secado el primero, cubriendo finalmente la herida con alquitrán vegetalo pintura de caucho como aislante de la humedad.

MUERTE REGRESIVA DE LAS RAMAS

Producida por el hongo Botryodiplodia theobromae Pat., la enfermedad comienza por un necrosado y secado de las partes terminales de la rama, acompañada de exudaciones gomosas. El ataque puede extencterse  al resto de la planta y originar el secamiento de los órganos afectados. El hongo es favorecido por la alta humedad relativa, períodos lluviosos y temperaturas entre 24 y 30°C. La enfermedad se ha encontrado principalmente en mandarina 'Aobinson' y lima 'Tahiti', susceptibles al ataque del hongo. En los tejidos muertos se ha observado perforaciones de Scolytides (Xyleborus sp.), los cuales pudieran diseminar la enfermedad.

Control: se realiza podando y quemando las ramas afectadas, aplicando pasta cúprica o pintura de caucho en la herida y tratando las plantas con fungicida (Orthocide- 50 y Benlate), un insecticida (Malathion) y un adherente (Supersticker o Surfactante HA), lográndose un eficiente combate de la enfermedad.

Fieltro

Es causada por el hongo Septobasidium alni Torrend., el patógeno ataca especialmente las ramas y el tronco, aunque también puede afectar las hojas y los frutos. Los órganos alcanzados se recubren de una formación felpuda, con apariencia de lanilla, decoloración que va desde marrón a gris pálido. La presencia de esta formación ocasiona la reducción del área de fotosíntesis y en casos severos, secamiento de ramas terminales. El hongo es favorecido por elevada humedad relativa y temperatura entre 22 y 260C, encontrándose asociado con insectos  tipo escamas, principalmente escamas coma (Lepidosaphes beckii N.), las cuales se hallan recubiertas por el micelio del hongo.

Control: podar y quemar las ramitas secas. En caso de ataques severos, deben programarse aspersiones con fungicidas: Benlate (1 g/l), Cupravit (3 g/l), Antracol (3 g/l) mezclado con Malathion (5 cc/l) o aceite blanco (5cc/I).

 ENFERMEDADES DE LAS HOJAS  Y  DEL FRUTO

Antracnosis

La enfermedad sobre hojas y frutos del naranjo dulce origina mancha marrón con bordes bien delimitados, siendo el agente causal Colletotrichum gloeo.sporioides (Penz) Sacc. El patógeno puede también ocasionar lesiones con exudado gomoso en las ramitas. Como consecuencia del ataque al follaje, las hojas se distorsionan, caen prematuramente y en la superficie de los frutos se notan pudriciones pardas. En los frutos de lima ácida la antracnosis es causada por Gloeosporium limetticolum Claus., el cual produce lesiones en forma de tacos, color marrón claro, observándose deformación del tejido enfermo. Ambos patógenos atacan en zonas con elevada humedad relativa, alta precipitación y temperaturas oscilantes entre 24 y 30°C.

Control: podar y quemar las partes afectadas: hojas, frutos, renuevos y ramitas terminales. Aspersión total de la planta con ciertos productos químicos: Benlate (1 g/l), Cobox o Dithane M-45 (2 g/l), mezclado con un adherente.

Mancha Grasienta

En Florida, esta enfermedad es causada por el hongo Cercospora citrigrisea Fisher y se manifiesta en forma de manchas negras o alquitranosas sobre el follaje. En Japón, la enfermedad es ocasionada por MycosphaerelIa horti Hara, el estado perfecto de C. penzigii Sacc., y por otra especie de Cercospora sp.

En Venezuela, el patógeno se encuentra presente en zonas citrícolas con alta humedad relativa, precipitación abundante y temperaturas entre 24 y 30°C, atacando naranjo dulce, grapefruit y mandarina.

Control: en caso de fuertes ataques, se recomienda emplear fungicidas a base de zinc, manganeso o cobre, a razón de 2 g/1 de agua más adherente, asperjando los árboles antes de la floración y después de la formación de los frutos.

Sarna o Verrugosis

Se manifiesta bajo tres formas: 1) sobre naranjo agrio, causada por el hongo EIsinoe fawcettii Bit y Jenk., 2) sarna en cítricos australianos, causada por Sphaceloma fawcettii var. scabiosa (McAlp. y Tryon) Jenk., y 3) sarna en frutos de naranjo dulce, causado por E. australis Bit y Jenk. En Venezuela se ha reconocido el hongo Sphaceloma fawcettii Jenk., forma asexual de E. fawcettii, ocasionando lesiones corchosas, sobresalientes la mayoría de los casos puede retorcer, arrugar o enanizar dichos Órganos. El hongo ataca en plantaciones con elevada humedad relativa, lugares sombreados y con abundante rocío, cuando existen temperaturas comprendidas entre 20 y  27°C, afectando limones verdaderos y, en menor grado, mandarinas y grapefruit. Se han registrado escasos ataques sobre frutos de naranjo dulce. 

Control: en plantaciones comerciales, conviene eliminar los órganos afectados por el hongo, destruir con fuego y proceder a tratar los árboles con productos a base de cobre (Cupravit, Cobox) o de manganeso (Dithane M-45) a razón de 2 -3 gil, usando adherente. 

Mancha de Septoria 

En California se ha señalado Septoria citri Pass., o S. limonum Pass., encontrada con frecuencia sobre frutos de naranjo 'Valencia', limón y grapefruit. En Venezuela se ha indicado S. citri sobre esas variedades, causando lesiones en forma de anillos concéntricos y puntitos oscuros que representan la estructura reproductiva del hongo. También se ha notado que las manchas no profundizan sino que se localizan en la corteza del órgano. Los ataques del patógeno se incrementan en zonas de clima fresco, en época de lluvia o de rocío abundante. 

Control:  cuando se presentan fuerte ataques, se recomienda aspijar productos  como:  Belate (1g/I)  Dithane M -45 (2 g/I)  u Orthocide -50 (2 g/I) mezclado con un adherente.

Fumagina 

Es producida por el hongo Fumago sp., el cual está asociado con escamas, áfidos y chinches harinosas, en cuyas secreciones azucaradas crece el micelio. La enfermedad se caracteriza por 1a presencia de una película negra que cubre la superficie foliar y ocasionalmente los frutos de la planta, limitando en cierto grado la fotosíntesis. El patógeno se favorece en zonas de elevada humedad atmosférica y en plantaciones sombreada.  sp. con alta densidad de siembra. 

Control: una forma indirecta de combatir el hongo consiste en la eliminación de escamas, áfidos y chinches harinosas. Por tanto, deben hacerse aspersiones con fungicidas a base de cobre o zinc, mezclado con un insecticida   fosforado (Malathion) y un adherente.