FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 44   Septiembre-Diciembre  1993

  FONAIAP   DIVULGA  No.  44                                                                                                     Septiembre-Diciembre    1993


     La Batata, Importancia y Utilización

Se resaltan las bondades de la batata como cultivo, alimento y recurso para la industria; hace énfasis en sus dos 
categorías y la importancia del almacenaje; destaca su provisión de vitaminas en la dieta y concluye resaltando 
su uso para combatir la malnutrición proteico-calórica en algunas áreas.              

Vicente R. Contreras. Investigador FONAIAP.
Centro de Investigaciones Agropecuarias del Estado Táchira-Venezuela


Entre los cultivos de alimentación del mundo y de acuerdo con documentos recientes de la FAO, la batata ocupa el séptimo lugar de producción en peso. En los trópicos, ocupa el cuarto lugar. Diversos atributos de la batata cuentan para su prominencia y reciente resurgimiento del interés en el cultivo. Este soporta condiciones ambientales extremas como vientos huracanados y sequías, lo cual poco cultivos pueden tolerar, cubre rápidamente la superficie, reduciendo las necesidades de herbicidas y  laboreo cultural; el uso de insecticidas y fungicidas es relativamente bajo, y la batata se desarrolla bien con poca suplementación de nitrógeno y en amplio rango de pH. de suelo sin la adición de cal.

La batata es versátil y los genotipos pueden ser seleccionados para llenar las necesidades de un uso en particular o para un grupo de consumidores. Las raíces de almacenamiento de la batata son consumidas directamente como alimento y las puntas del follaje son un recurso proteico menormente utilizado. En los trópicos, las raíces comestibles no son almacenadas por largos períodos, ya que el crecimiento indeterminado de la batata y la plantación múltiple, permite la cosecha de raíces reservantes durante la mayor parte del año, haciéndolas disponibles durante todo el año con poco uso de almacenaje.  Ambos, las raíces y el follaje, son alimentos para animales. Las raíces también pueden ser usadas como un recurso de almidón y para productos de fermentación como: vino, etanol, ácido láctico, acetona y butanol.

Dos amplias categorías de batatas son usadas para la producción de raíces de consumo humano: la de tipo corriente y la del tipo postre. La del tipo corriente es producida más ampliamente en los trópicos. Generalmente tiene la piel de un color blanco a crema coloreado y mayor contenido de materia seca, almidón y proteína que la del tipo postre. El alto contenido de materia seca y almidón son importantes para los usos industriales y la alimentación animal. Su alto contenido de proteínas es importante para la alimentación animal. El tipo postre, generalmente tiene la piel anaranjada y un mayor contenido de betacarotenos y azúcares simples que el tipo corriente. Algunos cultivares son intermedios entre estos extremos. Menos esfuerzo ha sido realizado para desarrollar el uso de las yemas del tallo y por consiguiente, pocos genotipos han sido desarrollados   específicamente para este propósito.

La batata ha sido de primera importancia en la dieta de muchas sociedades. Las dietas varían tremendamente a nivel mundial de una región productora a otra. Los montañeses en Papúa, Nueva Guinea confían a la batata el 60-90% de sus requerimientos de energía y el principal recurso de proteína. La República Popular China produce cerca del 75% de la producción mundial de batata, siendo el segundo cultivo después del arroz en ese país. En general, constituye un cultivo alimenticio importante en muchos países del trópico. En los Estados Unidos se produce para consumo como un suplemento vegetal y en muchas regiones está asociado estrictamente con fiestas religiosas.

Su uso como alimento ha declinado en algunos países a medida que se han incrementado otros consumidores. Por ejemplo, en Taiwán y Japón la batata para uso industrial y alimentación animal tiene mayor mercado que aquellas vendidas para consumo humano.

La utilización de la batata está afectada por la disponibilidad de almacenaje para las raíces. La calidad de muchos cultivares, incluyendo el sabor, puede mejorarse con el almacenaje, de hecho, “curada" o sea, la que se somete a suberización de la piel a través del secado, tiene el mayor precio. Para expandir los mercados urbanos en regiones productoras tropicales es necesario mejorar las facilidades de almacenaje y los métodos de manejo para almacenar.

La batata es un alimento de alta energía. Sus raíces tienen un contenido de carbohidratos totales de 25-30%, de los cuales el 98% es considerado fácilmente digestible. La batata provee un estimado de 113 cal/100 g, mientras que la papa provee 75 cal/100 g. A pesar de esta diferencia calórica, la papa puede elevar el contenido de azúcar en la sangre más que la batata. La batata es una fuente excelente de carotenoides de provitamina A. Una ración promedio del tipo postre provee 5.345 unidades internacionales (UI) de vitamina A por 100 g, que equivale a 121% de las recomendaciones dietéticas mínimas permitidas. Sin embargo, el contenido de carotenos varía en los diferentes tipos y cultivares en el rango entre 0 y 8.000 Ul/100 g. Recientes estudios del papel de la vitamina A y la fibra sobre la salud humana puede realzar aún más la imagen de la batata.

La batata también provee una fuente de vitamina C (20-30 mg/100 g), potasio (200-300 mg/100 g), hierro (0,8 mg/100 g) y calcio (11 mg/100 g). El contenido de aminoácidos es relativamente bien balanceado, con un mayor porcentaje de lisina que el arroz o el trigo, pero un contenido un tanto limitado de leucina.

Sin embargo, similar a la mayoría de otras raíces almidonosas y cultivos de tubérculos, la batata tiene relativamente bajo contenido de proteínas, con un rango entre 2,5 y 7,5% del peso seco, dependiendo del genotipo. Una combinación de leguminosas y batata podría combatir la malnutrición proteica-calórica en algunas áreas.