FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 53  Abril-Junio  1996

  FONAIAP   DIVULGA  No.  53                                                                                                                             Abril-Junio  1996


Consideraciones para realizar el diagnóstico nutricional de la palma aceitera

Reni Barrios*; Asdrúbal Díaz*; Diógenes Molina*


Investigador. FONAIAP-Centro Nacional de Investigaciones 
Agropecuarias del Estado Monagas. Maturín.


Las plantaciones de palma aceitera en Venezuela están establecidas en suelos ácidos, pobres en fertilidad y con bajo contenido de materia orgánica, por lo cual el manejo adecuado de la fertilización química es de importancia primordial y para lograrlo se necesita una acertada apreciación del estado nutricional de la plantación y de los principales componentes de éste en un complejo clima suelo-planta.

Diagnóstico nutricional del cultivo

Para realizar el diagnóstico nutricional de la plantación deben conocerse todas las condiciones de campo que tienen influencia en el crecimiento, desarrollo y rendimiento de la palma ma. En este sentido, se recomienda la elaboración de un registro que permita acumular información sistemáticamente en cuanto a las labores de campo efectuadas desde el inicio de la plantación.

El diagnóstico nutricional utiliza el análisis de suelos y el análisis foliar para la confirmación de síntomas visuales de deficiencia.

Síntomas visuales de desórdenes nutricionales

La apariencia de la planta indica claramente su condición de salud, por ello la manifestación visual de síntomas de deficiencia ha sido ampliamente caracterizada. Sin embargo, no debe confiarse solamente en estas características, ya que existen posibilidades de equivocarse al no tomar en cuenta la influencia de otros factores que alteran la manifestación de estos síntomas (plagas, mal drenaje, déficit hídrico, enfermedades).

Es importante destacar que los síntomas de deficiencias nutricionales se manifiestan a ambos lados del raquis y en hojas sucesivas, mientras que los síntomas provocados por otras causas tienden a presentarse desorganizadamente.


Foto 1. Planta con síntomas de deficiencia severa de nitrógeno. Obsérvese la clorosis general y el achaparramiento de la corona

Análisis de suelos

El análisis de suelos es una guía indispensable para diseñar recomendaciones que permitan el uso eficiente de los fertilizantes y enmiendas obtención de muestras representativas, en función de lo cual se sugiere lo siguiente:

Elaborar un croquis que determine áreas con condiciones semejantes en cuanto a origen y edad de la planta, topografía, color, textura y drenaje del suelo y prácticas agronómicas aplicadas.

• Tomar muestras entre 0 y 30 cm de profundidad.

• Mezclar un mínimo de diez submuestras para formar una muestra compuesta por cada 24 hectáreas.

• No mezclar muestras de áreas diferentes.

• No muestrear en sitios donde fueron aplicados los fertilizantes.

* No muestrear al pie de cercas o canales de drenaje.

* No tomar muestras en lugares de acumulación vegetal o donde hayan ocurrido quemas recientes.

* No muestrear en áreas de pendiente pronunciada o de drenaje deficiente.

Análisis foliar

El análisis foliar se basa en el criterio de que la concentración de un elemento esencial en la planta, indica la habilidad del suelo para suplir este nutrimento.

Foto 2. Fotíolos de palma mostrando síntomas de deficiencia de potasio. Obsérvese el punteado naranja, inclusive en la vena central del fotíolo.

Foto 3: Planta Joven con síntomas de deficiencia de magnesio. Nótese el amarilleo de las hojas de la parte inferior y media de la corona y del ápice de los fotíolos hacia la base.

La concentración de un elemento en la planta es el valor integrado de todos los factores que han interactuado e influenciado el crecimiento y desarrollo de la palma. Es importante señalar que, aún en diferentes condiciones, se presentan y se mantienen las relaciones entre los nutrimentos en los tejidos.

El muestreo foliar es más decisivo que el muestreo de suelos. En palma aceitera se toma a la hoja número 17 como representativa, ya que se ubica en la parte media de la corona, ha madurado recientemente pero no ha comenzado a envejecer.

En general, es importante tornar en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Elaborar un croquis con las áreas con similares condiciones.

• Realizar el muestreo en el mismo período climático, preferiblemente en la época seca cuando el contenido de los elementos es más estable.

• Cada muestra debe representar un máximo de 25 hectáreas y deben muestrearse al menos 25 palmas.

• Tomar dos pares de folíolos completamente sanos de la hoja 17, cortar segmentos de 10 a 20 cm de los mismos y eliminarle los bordes marginales y la nervadura central.

• Limpiar rápida y cuidadosamente los segmentos con un trapo limpio o algodón y agua destilada, y proceder al secado a una temperatura entre 65 y 80 cm, en un plazo máximo de 48 horas.

Foto 5: Detalle de hoja de palma con síntomas de deficiencia de boro, mostrando la forma corrugada de los folíolos característica de la misma.

Interpretación de los resultados de los análisis

Los niveles de fertilidad del suelo son clasificados como bajo, medio y alto, y constituyen un índice de su capacidad para suplir los nutrimentos a la planta.

El análisis foliar detecta los problemas nutricionales en su fase inicial, considerándose un nivel crítico por debajo del cual existe una alta posibilidad de lograr una respuesta positiva con aplicación de fertilizantes.

Los análisis foliares y de suelos definen el tipo y cantidad de elementos a aplicar como fertilizantes. Deben tomarse en cuenta las interrelaciones de los elementos entre sí y con el ambiente circundante, con el fin de maximizar la eficiencia en el uso de los mismos.

En el Cuadro 1 se pueden apreciar las concentraciones críticas algunos elementos en este cultivo. Los cuadros 2 y 3 pueden servir de guía para estimar las necesidades nutricionales de las plantas, de acuerdo con la edad y también la cantidad de nutrimentos que se inmovilizan y que se reciclan anualmente en las plantaciones, con lo cual se puede tener una idea de las cantidades de elementos a suplir como fertilizantes,

 

Fig. 1 relación entre los análisis de suelos y la necesidad de aplicación de fertilizantes

 

Como lineamiento general para la fertilización y el manejo de suelos, se pueden poner en práctica las siguientes consideraciones:

* Aplicar los fertilizantes cuando el contenido de agua en el suelo no sea deficitario ni excesivo, con el fin de garantizar su disponibilidad para la planta.

* Mantener la cobertura, con el fin de evitar la erosión y mejorar las condiciones físicas, químicas y biológicas del suelo.

* Reducir al mínimo la circulación de maquinarias pesadas dentro de la plantación, con la finalidad de evitar la, compactación del suelo.

Foto 4: Detalle de hoja de palma mostrando deficiencia dé magnesio. El amarilleo de los folíolos comienza del ápice hacia la base y esta permanece verde