FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 58  Octubre-Diciembre  1997

  FONAIAP   DIVULGA  No.  58                                                                                                             Octubre-Diciembre  1997


El patrón y su importancia en la fruticultura

Luis Avilán R. *

* Investigador. FONAIAP - Centro Nacional de Investigaciones
 Agropecuarias. Maracay.


El árbol frutal cultivado en nuestros días se caracteriza por estar formado por la unión en simbiosis de dos individuos por medio del injerto. Uno de estos indivuduos llamado patrón o portainjerto es el que constituye el sistema radical y una parte del tronco, sobre el cual se injerta la yema, vareta o púa del otro que formará en definitiva la copa o parte   aérea y producirá los frutos correspondientes a su particular genética.

Significación del patrón para la futicultura.

El empleo del patrón en los frutales ha constituido uno de los grandes artificios utilizados por el hombre, a través del cual no sólo ha logrado una mejora sustantiva de los rendimientos y la calidad de los frutos, sino que también le ha permitido su explotación en sitios con características que le son adversas para el normal desarrollo de la planta.

En general, el árbol frutal cultivado en nuestros días se caracteriza por estar formado por la unión en simbiosis de dos individuos por medio del injerto. Uno de estos individuos llamado patrón o portainjerto es el que constituye el sistema radical y una parte del tronco, sobre el cual se injerta la yema, vareta o púa del otro que formará en definitiva la copa o parte áerea y producirá los frutos correspondientes a su particular genética.La elección del mejor patrón representa uno de los problemas más complejos de la fruticultura. Ningún país frutícola del mundo ha resuelto este problema en forma satisfactoria, aunque todos están empeñados en experiencias sistemáticas encaminadas hacia la solución. No puede haber, por otra parte, soluciones aplicables a todos los países, ni siquiera a todas las regiones de un país. En este sentido vale destacar los estudios para la selección de patrones en manzano, emprendidos por M. Hatton, Director de la Estación Experimental de East Malling, en el condado de Kent de Inglaterra (1912-1913), los cuales son conocidos mundialmente por las siglas EM, que permitieron su desarrollo y que en la actualidad cuentan con materiales para solventar parte de la problemática del cultivo.

En el país, los estudios sobre patrones son de data relativamente reciente y constituyen una línea importante de investigación del FONAIAP y otras instituciones. En este sentido, vale destacar los estudios para la selección  de patrones en manzano, emprendidos por M. Hatton, Director de la Estación Experimentalde East Malling, en el condado de Kent de Inglaterra (1912-1913), los cuales son conocidos mundialmente por las siglas EM, que permitieron su desarrollo y que en la actualidad cuentan con materiales para solventar parte de la problemática del cultivo.

Ventajas del uso del patrón y de la injertación

Es indudable la influencia del patrón sobre el injerto o copa, pero se desconoce la multiplicidad de sus efectos, su intensidad y el o los mecanismos, según los cuales pueden actuar.

-Adaptabilidad al medio.

Constituye quizás uno de los principales atributos que aporta el patrón, y que probablemente motivó inicialmente su empleo. Las plantas en general y según la especie que se trate, muestran enormes diferencias en su resistencia o tolerancia a factores bióticos y abióticos presentes en el suelo y el ambiente. Esto ha permitido que frutales o cultivares del mismo, caracterizados por presentar excelentes cualidades, pero susceptibilidad a un factor adverso del suelo, cuando son injertados sobre un patrón adaptado a las condiciones presentes en el sitio, propicien su desenvolvimiento. Es decir, que los patrones permiten la posibilidad de desarrollar un frutal o cultivar por sí solos, en medios en los cuales no sería posible su crecimiento normal y económico.

Los suelos con un perfil profundo y uniforme son los más recomendados para los frutales; deben ser de un tipo medio, ni muy pesados ni ligeros. Deben tener un drenaje satisfactorio, que no permitan la acumulación de agua libre en las zonas de las raíces, ni que percole rápidamente, debido a que arrastran los elementos fertilizantes hacia las profundidades y resultan una pérdida para el cultivo. Aunque resulta inútil, desde el punto de vista económico, el pretender utilizar en fruticultura los terrenos con mal drenaje, el conocimiento sobre la resistencia relativa de las diferentes especies a esta circunstancia es muy útil para aminorar las probabilidades de accidentes excepcionales, eligiendo de manera conveniente las especies y los portainjertos.

- Tolerancia o resistencia a los agentes bióticos (plagas y enfermedades)

En el suelo existe una población de seres u organismos de poblaciones inmensurables, cuya actividad tiene efectos beneficiosos y nocivos para el desarrollo de las plantas. La búsqueda de patrones que no sean afectados por bacterias, hongos y nematodos constituye una de las actividades que con mayor énfasis se realiza en los trabajos de selección.

Las enfermedades causadas por hongos ocasionan grandes daños y su presencia en el suelo es casi imposible de evitar. Los hongos Phytophthora sp. atacan un sinnúmero de cultivos, afectando a los tejidos conductores de savia de raíces y tronco. Los naranjos dulces y otros cítricos son suceptibles a la enfermedad denominada gomosis, cuya severidad es mayor en lugares de humedad elevada y suelos pesados. El naranjo amargo (Citrus aurantium) se le consideraba el mejor porta injerto, por su resistencia a la gomosis, cualidades de adaptación a numerosos tipos de suelo; así como por la producción y calidad de frutos que confiere a los cultivares sobre él injertados.

Sin embargo, con la aparición de la tristeza, enfermedad de origen viral, característica de la asociación citrus injertado sobre naranjo amargo, causante de grandes estragos en la citricultura venezolana y del mundo se limita su empleo como patrón, siendo incluso prohibido para todas las especies de cítricos, con excepcion de los limones verdaderos (Citrus limon). El empleo del patrón mandarina 'Cleopatra' y el limón 'Volkameriano' que no son afectados por la gomosis y tolerantes a la tristeza, permitieron afrontar la problemática planteada. Con el advenimiento de la presencia del blight, enfermedad de etiología desconocida y que afecta a todos los cítricos, nuevamente se presentó una difícil situación, debido a que el limón 'Volkameriano' es muy afectado por el blight. En el caso del patrón 'Cleopatra' es de baja incidencia.

El cambio de patrón no puede hacerse de un día para otro, y por ello , no es recomendable que el desarrollo de un frutal se haga sustentado sobre un único patrón. En el Cuadro 1 se presentan algunos de los patrones estudiados para cítricos y sus atributos.

Cuadro 1. Características de algunos patrones para cítricos.

Patrón

A

B

C

D

E

F

G

H

I

Naranja cajera

MS

T

T

T

R

R

V

B

MB

Citrumelo Swingle

R

S

T

S

R

S

BV

B

B

Mandarina Cleopatra

T

T

MT

S

S

S

RV

M

B

Limón Volkamer.

T

T

T

S

T

T

MV

B

R

A: Tristeza = R: resistente; T: tolerante; MS: muy susceptible
B: Exocortis = R: resistente; T: tolerante; S: susceptible
C: Xiloporosis = R: resistente; MT: muy tolerante; T: tolerante; S: susceptible
D: Psorosis = R: resistente; T: tolerante; S: susceptible
E: Gomosis = R: resistente; T: tolerante; S: susceptible
F: Sequia = R: resistente; T: tolerante; S: susceptible
G: Vigor = V: vigoroso; MV: muy vigoroso; VM: vigor medio; BV: bajo vigor
H: Producción = B: buena; M: media
I: Calidad del fruto = B: buena; MB: muy buena; R: regular


En el aguacate, la enfermedad denominada pudrición de las raicillas, causada por el hongo Phytophthora cinnamomi Rands, constituye uno de los más serios problemas a nivel mundial que afronta el cultivo. Como medida de control se recomienda ademas de una adecuada selección de los suelos, el empleo de patrones de la raza mexicana como 'Duke' y 'Topa Topa', los cuales muestran cierta tolerancia.

- Influencia sobre la entrada en fructificación.

Con la injertación se pierden las características juveniles  y llega a tener mas tempranamente diferenciación  floral; es decir, el árbol será más precoz. Las plantas injertadas pueden entrar en fructificación  en el mismo año  o de uno a dos años; mientras las no injertadas después de varios años. Esta hecho tiene   repercusiones de orden económico para el fruticultor, pues la rentabilidad es favorecida al posibilitar el retorno  a más corto plazo de los capitales invertidos.  

Cuando el árbol ha sido obtenido directamente de la semilla, lo cual se conoce con el nombre de pie franco o "seedling" en ingles, es decir cuando no se ha injertado, la presencia de los caracteres juveniles típicos manifestados por una exuberante vegetación se prolonga por muchos años. Las flores no se forman sobre los árboles hasta que éstos llegan a tener determinada edad. La producción de yemas vegetativas es más intensa, por lo que el desarrollo significa exclusivamente la formación de tejidos de órganos semejantes a los que ya existían. Así los meristemas apicales van produciendo alargamiento de las ramas, las yemas axilares producen nuevos brotes con hojas y el cambiun determina el aumento en grosor. La producción de yemas florales o inicio en la etapa productiva es nula o muy escasa.

- Acción del patrón sobre el injerto y viceversa:

Acción sobre el tamaño de los árboles

El patrón al proporcionar el sistema radical posee una capacidad propia que puede ser parcialmente modificada por la acción del injerto y ésta ultima a su vez, sufrir alteraciones por la acción del primero. Es decir, que se establece una interacción que induce cambios en el comportamiento de los materiales que conformaron la unión.

La acción selectiva del patrón respecto a determinados elementos nutritivos puede ser distinta a las exigencias manifestadas por el injerto. Estos cambios en la naturaleza y en la intensidad de la nutrición se manifiestan por la diferencia de vigor y en consecuencia, por el desarrollo que provocan. El patrón, de acuerdo con su propio tipo de sistema radical y con sus características genéticas puede inducir árboles de diferente capacidad de desarrollo de la parte aérea, bien sea disminuyéndola o aumentándola, en comparación con la que tuvieran si se encontraran sobre sus propias raíces.

Los sistemas de producción de altas densidades de población exigen el empleo de patrones enanizantes o en su defecto, el uso de métodos de propagación, conducción de la planta, así como de procedimientos físicos (poda) o químicos (reguladores de crecimiento) que limiten el desarrollo excesivo de los árboles.

El cultivo de plantas de reducido tamaño o porte, enanos o semienanos se considera actualmente en contraposición con los de árboles de gran vigor vegetativo que caracterizó al sistema tradicional de explotación, mucho más conveniente y económico en toda la fruticultura. Los estudios sobre el comportamiento de los frutales perennes de tipo arbóreo en el trópico, en relación con su eficiencia reproductiva lo avalan, así como las razones de orden económico involucradas en el manejo. Las labores de mantenimiento de los huertos y la cosecha se llevan a cabo de manera más eficiente en árboles no muy desarrollados, en los que la menor producción individual queda ampliamente compensada por la existencia de un elevado número por unidad de superficie.

Acción en relación con la uniformidad de los huertos.

La variabilidad inherente a las plantas producidas por semillas de la mayoría de los frutales se extiende al hábito de crecimiento, el vigor, la resistencia a enfermedades o plagas y la eficiencia en la utilización de los fertilizantes. Las plantas del mismo clon o cultivar multiplicadas vegetativamente tienen una constitución idéntica a las de su progenitor. Por lo tanto, excepto las mutaciones, se puede esperar que todas sean semejantes.

Los cultivares actualmente utilizados son el resultado de la selección hecha por el hombre entre multitud de diversas formas o individuos productores; es decir, clones de idéntica composición genética. Cuando se usa la propagación sexual o por semilla, debido al alto grado de heterogeneidad genética, las nuevas combinaciones que resulten pueden ser muchas con variaciones de todos tipos, lo cual constituye el fenómeno llamado segregación y recombinación genética; es decir, la aparición por vía sexual de nuevos individuos distintos todos entre sí, cada uno con sus características propias y distintos de los progenitores.

La propagación sexual o por semilla se emplea para la producción de patrones, sin que ello signifique tampoco que este sea el procedimiento idóneo en todos los casos para su obtención. Algunas especies frutales como los citricos y el mango, presentan la particularidad de dar origen a varios embriones provenientes de una sola semilla. Este fenómeno es llamado poliembronía. Tiene especial importancia en el caso de patrones, pues estos embriones nucelares y origen somático dan plantas similares a la madre, lo que permite conocer de antemano las características de patrón a utilizarse, como si fuera una propagación vegetativa, así como contar con un lote uniforme de patrones.

Acción en relacíon con las características de los frutos

El mercado de los frutos frescos está regido por "Normas de Calidad", las cuales hacen referencia, tanto del aspecto exterior e interno que debe presentar o poseer el fruto. El "tipo" constituye las características que identifican a un cultivar, en lo relativo a su forma, color, peso y dimensiones; así como los inherentes a sus atributos internos. El patrón induce cambios sustanciales en relación con la duración del período de maduración y sobre el "tipo", los cuales pueden afectar o beneficiar el proceso productivo como su comercialización.

En cítricos la influencia que ejerce el patrón es ampliamente conocida; así por ejemplo, sobre limón rugoso (Citrus jambhiri Lush) determina la producción de frutos de menor calidad, debido a la presencia de cáscara más gruesa, con menor cantidad de jugo que es pobre en azúcar y en acidez. En el caso de otros frutales como el mango y el aguacate, las informaciones son escasas.

En los últimos años algunos exportadores de 'Haden' han confrontado problemas en la aceptación de sus frutos en el mercado internacional, por no adecuarse sus características morfológicas fielmente al "tipo" del cultivar. El 'Haden' fue obtenido de una semilla de 'Mulgoba' en Florida (USA) y ha sido probablemente propagado sobre 'Turpentine', y las caracteristicas del fruto procedente de esta combinación, conforma el "tipo" conocido del cultivar.

Cuando se injerta sobre un patrón distinto, como los criollos 'Bocado' e 'Hilacha', su morfología sufre modificaciones; con el primero, de menor tamaño y textura más dura, mientras que con el segundo, más alargado u oblongo, perdiéndose así la forma oval característica del cultivar. Esto estaba pasando desapercibido, pero en la medida en que los consumidores "conocen" más o se familiarizan con la fruta y el mercado adquiere mayor importancia, los paises importadores exigen se respeten las 'Normas de Calidad' establecidas para su comercialización. Por ello, es necesario que los frutos sean fieles al "tipo" del cultivar. Al respecto, vale destacar que el 'Haden' cultivado en Cuba se caracteriza por ser de mayor tamaño, alargado y sabor más ácido y para facilitar su aceptación lo denominan 'Super Haden', lo cual es como decir otro cultivar.

Los estudios realizados por el FONAIAP sobre la selección de patrones enanizantes para el mango, han evidenciado estas modificaciones. Los patrones poliembriónicos 'Rosa', 'Camphor', 'Ceniap-2', 'Perú' y los monoembriónicos 'Divine', 'Tetenene manzana' y 'Currucai' de bajo porte modifican la forma y dimensiones (largo, ancho, grosor) de los frutos, con mayor incidencia en 'Haden' (Figura 1) y 'Tommy Atkins'. En 'Edward' y 'Springfels', los cambios fueron muy limitados, no modificando el "tipo".

En aguacate, cuando se emplea para el cultivar Nelan el patrón 'Ceniap-2' y las combinaciones de los patrones 'Ceniap-3', 'Duke' y 'Booth-1', con el injerto intermedio 'Calidad', los frutos sufrieron modificaciones en la forma y tamaño. Las más acentuadas fueron observadas en 'Duke'/'Calidad'/'Nelan', cuyos frutos fueron más pequeños y redondos, en contraposición a la forma romboidal del "tipo" correspondiente al cultivar. (Figura 1).

Conclusiones

La fruticultura en Venezuela constituye uno de los renglones agrícolas con mayores perspectivas económicas, y los patrones constituyen uno de los pilares fundamentales para su desarrollo. El patrón ideal no existe, y por ello tienen una trascendental importancia los trabajos de selección y estudio sobre su comportamiento que se han venido conduciendo en el FONAIAP y otras instituciones,
    
     

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