FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 59  Enero-Junio  1998

  FONAIAP   DIVULGA  No.  59                                                                                                                          Enero-Junio  1998


LA MEJOR MANERA DE CONTROLAR LA MASTITIS BOVINA

Eduardo Noguera.

Investigador FONAIAP-CIAE Zulia.
Estación Local El Guayabo. Maracaibo.


Resumen

Aunque la mastitis ocurre esporádicamente en todos los mamíferos, adquiere mayor importancia económica solamente en las vacas lecheras.
Es sin duda, la enfermedad más importante con la cual debe enfrentarse la industria lechera.
La solución en gran parte, radica en establecer medidas profilácticas y/o de higiene en el método de ordeño.
Se debe bañar a las vacas antes del ordeño, dejándolas reposar aparte del sitio de ordeño.
Esta medida hace que se estimule el defecado y la micción, evitando que lo hagan durante el ordeño.
Revisión periódica de los pezones y del equipo de ordeño cuando es mecánico, sustituyendo las pezoneras viejas y agrietadas que son fuente de infección.

Introducción.

El término de mastitis se refiere a la inflamación de la glándula mamaria en las vacas, lo cual trae como consecuencia que se alteren las características físicas, químicas y bacteriológicas de la leche y que se modifique el tejido glandular. Por lo tanto, se produce una reducción en la cantidad de leche producida.

Aunque la mastitis ocurre esporádicamente en todos los mamíferos, adquiere mayor importancia económica solamente en las vacas lecheras. Es sin duda, la enfermedad más importante con la cual debe enfrentarse la industria lechera.

Si tomamos en cuenta la estructura de los precios que rige para la leche, según publicación en Gaceta Oficial de la República de Venezuela de fecha septiembre 17 de 1996, tenemos lo siguiente:

Tipo de leche

Precio mínimo
Productor
Bs./litro

Leche caliente.

Leche fría entre dos y cuatro horas de reductasa.

Leche fría con más de cuatro horas de reductasa.

Bono por contenido de grasa superior a 3,2 %.

113

122

133

0,50

Además del pago adicional que efectúan algunas empresas a los proveedores que participan en programas nacionales de control y erradicación de la brucelosis, tuberculosis que sean fincas con menos de 10 % de mastitis subclínica.

De acuerdo con esta estructura de precios, un productor que tenga por ejemplo una vaca que produzca ocho litros de leche en el ordeño de la mañana y seis en el de la tarde, serían 14 litros por día. Si se paga la leche fría con más de cuatro horas de reductasa, el cual sería un tipo de leche premium a 133 Bs./litro, tendríamos 14 litros x 133 Bs. = 1.862 y 55.860 Bs./litro/mes. Suponiendo que esa vaca presente mastitis, el productor dejaría de percibir esa cantidad por vaca/día o mes.

Este análisis evidencia que la mastitis es un problema, sobre todo económico en la ganadería venezolana, ya que además de la pérdida por la enfermedad hay que sumarle los otros costos, entre ellos el tratamiento curativo.

Los resultados de un estudio en el cual se tomó en cuenta el índice CMT (California Mastitis Test), como indicador de la severidad de la mastitis en un rebaño y el índice CMT- BR/AR (bajo riesgo/alto riesgo), resultado de dividir el número de cuartos de ubre con negativo, trazas o una cruz, llamado grupo bajo riesgo, sobre el número de cuartos de ubre que dieron resultados de dos o tres cruces, llamado grupo de alto riesgo, realizado en El Guayabo, estado Zulia (sur del Lago de Maracaibo), en dos fincas, tomando en cuenta el nivel de tecnificación, la forma de ordeño y sin hacer mención de cuál tipo de ordeño es el más recomendable o mejor señalados en el Cuadro 1, inducen a establecer la mejor manera de controlar la mastitis bovina.

¿Cuál es la solución?

La solución, en gran parte, radica en establecer medidas profilácticas y/o de higiene en el método de ordeño.

Medidas profilácticas

  1. Higiene en el ordeño para evitar la transmisión de gérmenes de una vaca a otra.

  • Se debe bañar a las vacas en conjunto antes del ordeño, dejándolas reposar por un rato en un lugar aparte del sitio de ordeño. Esta medida hace que se estimule el defecado y la micción, evitando que lo hagan durante el ordeño.

  • Lavado de ubres en forma individual y secado con papel absorvente. Con esta práctica no sólo se retira el lodo y el estiércol de la piel, sino que también se estimula la baja de la leche.

  1. Realizar un buen ordeño con un escurrido total de la leche de la ubre. Al finalizar el ordeño debe aplicarse un sellador en el orificio del pezón, evitando así la penetración de gérmenes que infecten la ubre.

  2. Revisión periódica de los pezones y del equipo de ordeño cuando es mecánico, sustituyendo pezoneras viejas y agrietadas que son fuente de infección. Al finalizar el ordeño pasar las pezoneras por una solución desinfectante. Si el ordeño se realiza a mano, el ordeñador debe lavarse las manos con agua y luego sumergirlas en una solución desinfectante.

  3. Además de estas medidas profilácticas se debe realizar, cada cierto tiempo, el California Mastitis Test (CMT) al rebaño. Esta es una prueba para determinar la mastitis en rebaños más que en vacas individuales.

  4. Tratar correctamente los casos clínicos. Ordeñar a fondo y a mano los cuartos afectados y aplicar el tratamiento curativo. Las vacas con mastitis deben ordeñarse al final.

  5. Establecer un programa de secado. Al secar una vaca se debe aplicar un tratamiento con antibióticos, especialmente en vacas con antecedentes de mastitis. Con esta práctica se reducen las infecciones en el parto siguiente.

Cuadro 1. Resultados de los índices de CMT-BR/AR, en dos fincas ubicadas en el sur del Lago de Maracaibo.

 

Indices*

CMT

BR/AR

Finca con ordeño mecánico, baños de vacas previo al ordeño y lavado de ubres.

0,06

58,23

Finca con ordeño a mano y bajas condiciones de higiene.

1,2

4,27

* El índice de CMT, considerado como deseable es de 0.5, mientras menor sea, menor será la magnitud de la mastitis.

El índice CMT-BR/AR debe ser tan alto como sea posible. Estos índices dan un perfil de la situación del rebaño.