Entre los cultivos más utilizados para este tipo de asociaciones están el cacaotero (Theobroma cacao), el guayabo (Psidium guajava), la palma africana (Elaeis guinensis) y el cocotero (Cocos nucifera) entre otros. De las especies animales utilizadas para este tipo de explotaciones sobresalen los ovinos por varias razones, entre ellas tenemos: su tamaño pequeño que permite la adaptación a fincas pequeñas, disminuyendo el daño mecánico que se le pueda causar a las plantas por ramoneo o por el mismo trafico de los animales; su docilidad permite que cualquier miembro de la familia los pueda manejar; los ovinos consumen bien y crecen satisfactoriamente, alimentándose de una gran diversidad de hierbas que aparecen espontáneamente dentro de las plantaciones de café.

No obstante, aunque parecen evidentes las ventajas que presentan las asociaciones de esta naturaleza, también tienen sus desventajas y limitaciones que es bueno conocer y tener en cuenta para no fracasar en este tipo de explotación.

Diversificación ante todo

La decisión de introducir ovinos en la finca debe ser vista y asumida, ante todo, como una explotación adicional que requiere de inversiones y de las atenciones propias de la cría animal; del beneficio de control de las malezas, así como el estiércol producido por los animales, que debe ser considerado como un subproducto que mejora la fertilidad del suelo. Algunos productores han adquirido rebaños ovinos pensando fundamentalmente en que van a tener un control de malezas sin costo; abandonando los animales a su propia suerte con las consecuencias de mortalidades elevadas por falta de atención; al final desisten.

Esto nos lleva al planteamiento de que sólo los productores con conocimientos y vocación para la explotación animal son quienes deben adoptar este tipo de asociaciones. En el caso que no tengan conocimientos es necesario que puedan acceder y pagar el asesoramiento técnico.

Limitaciones climáticas

En Venezuela, el café se cultiva en una gran diversidad de condiciones de precipitación, suelos y altitud. Los ovinos prefieren los suelos bien drenados y precipitaciones inferiores a 1.300 mm/año. Precipitaciones mayores combinadas con suelos pobremente drenados conllevan a una alta parasitación, tanto externa como interna y a daños en las pezuñas que causan elevadas mortalidades, así como el aumento de los costos.

Tamaño de las fincas

La extensión mínima de las explotaciones cafetaleras no debe ser menor a cinco hectáreas, para que pueda mantener un rebaño de un padrote y 25 hembras con su respectiva descendencia. Es deseable instalar un potrero de gramíneas para mantener fuera los animales, cuando por diferentes razones, no se desee mantenerlos dentro del cafetal (Sánchez, 1996).

Explotación del café

En fincas tecnificadas con altas densidades de cultivo (más de 4.500 plantas/ha) la materia vegetal aportada por las malezas puede ser baja y limitar la sustentabilidad animal (capacidad de carga) en estos casos, los costos de instalación y mantenimiento de los ovinos pueden no ser debidamente recompensados con los beneficios; es decir, la rentabilidad de la asociación puede estar por debajo de lo aceptable. La asociación funciona mejor en fincas de mediana a baja tecnología y si se cuenta con grandes extensiones, mejor aún.

Para asociar ovinos al café es necesario reubicar los cambures, ya que son consumidos ávidamente. Igualmente cultivos asociados en fase temprana con el café (yuca, maíz, frijol) son incompatibles con los ovinos. En estos casos es necesario ubicar y aislar un terreno que se dejará para la huerta.

Infraestructura requerida

Además de la inversión inicial en el plantel de cría, se requiere cercar el perímetro de la propiedad, de ser posible con maya para ovejas y construir un galpón (aprisco) para que duerman los animales. Este galpón puede construirse con techo de zinc, piso de tierra y paredes de bloques alrededor. Las dimensiones deben ser de acuerdo con el número de animales. Debe existir, al menos, un compartimento separado para las hembras próximas a parir o recién paridas.

Cuidados con los ovinos

Puede ser que las plantaciones de café sobrevivan y produzcan algo con un mínimo mantenimiento, pero los animales es otra cuestión bien diferente. Para el caficultor experimentado, las labores de mantenimiento del café pueden ser de su total conocimiento, pero no así el cuidado con los animales. Se debe establecer un plan sanitario, el reemplazo anual de los padrotes, un plan de registro de las hembras para su posterior selección, castrado de los machos, descolado de los corderos, entre otras prácticas. Ya se dijo anteriormente que de no contar con los conocimientos, es necesario realizar cursos en las instituciones especializadas o buscar la asesoría debida.

Razas de ovinos

Para la zona cafetalera se deben explotar mestizos entre las razas West African, Corriedalle, Barbados barriga negra, Persa cabeza negra y Merino, entre otras razas. No conviene explotar animales puros West African que son poco dóciles y mejor adaptados a las zonas bajas. El mestizaje entre esta última y la raza Corriedalle tiene una buena adaptabilidad al clima cafetalero. Las razas de lana pueden no comportarse satisfactoriamente. La producción de lana debe desecharse, ya que la zona intermedia no es apta para este tipo de animales. Se deben producir animales para carne.

Bibliografía

Benezra. M. 1987. Alimentación de ovinos con recursos no tradicionales. En: Taller de utilización de la oveja en la limpieza de cafetales. Caracas, Ven. UCV. p. 68-73.

Matiello, J.; Carvalho, C.; Shalders, C.. y Rasga, A.. 1980. Uso de ovinos para controle de mato en cafezais. Anais do 8vo Cong. Bras. Pesq. Caf. p. 444-446.

Rincón, E. 1995. Producción en sistemas silvo-pastoriles. Hellisar Libros. Maracaibo. 185 p.

Sánchez, L. 1996. Evaluación integral de la asociación ovinos-café. Tesis (MSc.).