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FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 63 Julio-Septiembre 1999 | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
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FONAIAP DIVULGA No. 63 Julio-Septiembre 1999 |
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Epoca de siembra para el
sorgo granífero Rafael González. Investigador Fonaiap
Luis
Guzmán. TAI |
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El sorgo granífero puede sembrarse en diferentes épocas del año,
con posibilidades de obtener rendimientos económicamente rentables. En
los llanos occidentales y principalmente en el estado Portuguesa, las
siembras de este cereal se concentran en dos épocas definidas del año.
La primera se inicia durante el ciclo de lluvias, la cual abarca
4% y la segunda, al final del ciclo de lluvias; es decir, la siembra de
norte-verano después de realizada la cosecha del maíz es la más común y
a la cual corresponde la mayor superficie sembrada. Alcanzan 96% del
total de siembra durante los meses de noviembre, diciembre y parte de
enero, cuando las lluvias son escasas y el contenido de humedad en el
suelo es menor que durante el ciclo normal de lluvias, por lo que los
rendimientos del cultivo se ven afectados por la falta de humedad en las
etapas de floración y llenado de granos. El ensayo sobre épocas de siembra se condujo en la colonia agrícola de Turén, área que abarca más de 30% de la producción de sorgo en el estado Portuguesa. En el Cuadro 1 se muestra la distribución mensual de la precipitación correspondiente al ciclo de crecimiento de los cultivares comerciales de sorgo empleados. El objeto principal de la experimentación fue determinar la época de siembra más adecuada para el desarrollo del sorgo y su efecto sobre los rendimientos en granos, tomando en consideración factores de orden climático, ornitológico, incidencia de plagas y de enfermedades, entre otros, que nos permiten aprovechar al máximo el potencial genético de producción de los cultivares comerciales empleados para las siembras.
Cuadro 1. Distribución mensual de la precipitación durante el ciclo de
las plantas.
Se escogieron los seis cultivares más utilizados por los
productores del estado Portuguesa: Pioneer 8168, Himeca 101, Chaguaramas
VII, HW 1758, Sefloarca 5 y Prosevenca 5. En la Figura 1 se observan las
seis épocas de siembra seleccionadas para el desarrollo del ensayo, con
intervalos de 30 días, habiéndose sembrado la primera el 15 de julio y
la última el 15 de diciembre.
El manejo agronómico consistió en una fertilización básica
(N-P-K), utilizando 300 kg/ha de la fórmula química 12-24-12 y un
reabono con 150 kg/ha de urea/ha, a los 25 días después de la
germinación del sorgo. El control de malezas se realizó con aplicaciones
preemergentes de Gesaprín-MOF, en dosis de 3 kg/ha y aproximadamente dos
limpias manuales por épocas. El gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) y la mosca del ovario En
el Cuadro 2 se muestran los resultados obtenidos, donde se puede
observar que el mayor rendimiento corresponde a la segunda época (15 de
agosto) y los más bajos en la sexta época (15 de diciembre). Las épocas de
siembra correspondientes a julio, septiembre y octubre muestran
rendimientos más o menos iguales, aun cuando puede observarse que la de
mayor rendimiento entre estas tres épocas fue la del 15 de julio.
Cuadro 2. Efecto de la época de siembra en el rendimiento
Las siembras realizadas en los meses de noviembre y diciembre
promedian rendimientos muy bajos y uno de los factores que influyen en
estas bajas producciones de los híbridos de sorgo es la presencia del
pájaro arrocero (Spiza americana),
que consume vorazmente el sorgo y ocasiona grandes pérdidas al productor.
En cualquier zona del estado Portuguesa, las siembras de sorgo granífero
realizadas en los meses de noviembre, diciembre y parte de enero, se
desarrollarán con bajos contenidos de humedad en el suelo, por lo que los
rendimientos del cultivo son afectados por la sequía, especialmente en
aquellos suelos con bajo poder de retención de humedad.
En las siembra para el ciclo de norte-verano debemos señalar que
éstas no deben pasar del mes de octubre, salvo en algunas zonas donde los
suelos presentan una gran capacidad de retención de humedad o donde el
agua se encuentra a poca profundidad del suelo, siendo fácilmente
aprovechado por el sorgo. Otros factores que influyen en las siembras
tardías es el poco aprovechamiento del fertilizante por parte del cultivo,
todo lo cual conlleva a la obtención de bajos rendimientos, siendo
antieconómico para el productor.
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