FONAIAP DIVULGA > Colección > Número 52   Enero-Marzo  1996

  FONAIAP   DIVULGA  No.  52                                                                                                                         Enero-Marzo  1996


El Agua, fuente vital para el desarrollo de la agricultura y la piscicultura sustentables

Walkiria Aragort*; Tiburcio Linares**

 * Investigador FONAIAP. IIV-CENIAP, Maracay.
** Gerente General del FONAIAP


El agua, no sólo germen de vida es indispensable para la preservación de ella, llámese vegetal, animal o humana, pues la célula, como unidad funcional no podría mantener su actividad en ausencia del suministro de este factor primordial.

En una agricultura sostenible o sustentable, debe considerarse si su uso para fines agrícolas está en competencia con las reservas para consumo humano, a sabiendas de que la producción agrícola es esencial en el suministro de alimentos indispensables para la vida humana, y también que la agricultura bajo riego produce más (2 a 1) que la agricultura de secano.

La literatura internacional indica que más de 50% del agua que se consume es utilizada en la agricultura y ello pudiera originar en el futuro inmediato un desequilibrio inadecuado. Por consiguiente, se requieren mayores investigaciones y actividades de extensión para utilizar prácticas más eficientes de riego.

Se sabe que el agua es un recurso constante, por las posibilidades que ofrece su ciclo en la naturaleza, pero lo que resulta evidente es que las fuentes de las cuales podernos obtener el agua son cada vez menores. Esto ocurre debido a la acción depredadora del hombre o por desconocimiento de los lapsos requeridos para que el agua pueda reponerse plenamente. Así por ejemplo, el agua corriente tarda en reponerse totalmente 16 días, el agua de los pantanos cinco años, la de los lagos 17 y el agua subterránea 1.400 años. En consecuencia, la utilización de los depósitos acuíferos subterráneos debe guardar relación con la mayor capacidad de reposición, de modo que la extracción no sea mayor y tienda a su agotamiento, pues ello causaría modificaciones importantes.

Toma de Agua para la truchicultura Santo Domingo, estado Mérida (Foto: W. Aragort).

En Venezuela se plantea el desarrollo de una agricultura sustentable en el sistema ecológico sabana, caracterizado por dos estaciones bien delimitadas, trayendo como consecuencia suelos pobres, particularmente en fósforo y pH ácido. Estas condiciones nos plantea el desarrollo de variedades adaptabas a estas condiciones utilizando prácticas agrícolas de bajos insumos. Desde el punto de vista pecuario, las especies forrajeras clasificadas como braquiarias, ofrecen condiciones favorables de adaptación, resistencia a la sequía y por la naturaleza de sus raíces contribuyen a la sostenibilidad y recuperación del terreno, evitando el efecto erosivo de las lluvias y del viento.

En nuestro país existen áreas con diferentes calidades de agua, las cuales deben ser consideradas porque la sensibilidad de los animales domésticos es diferente, as! vemos que los ovinos ocupan el puesto 12 de una escala del 0 al 14, el bovino de carne 8, el de leche 6, el equino 46, el porcino 4 y las aves la especie más exigente. Esta degradación de los animales domésticos nos indica que pocas especies compiten con los seres humanos por el agua potable.

El paradigma de una agricultura sustentable o sostenible es contrario al que estableció la llamada "Revolución verde" de los 70,en la cual la condición sine qua non era la agricultura con uso tecnológico intensivo, tales como: laboreo, semillas o variedades vegetales de alta producción, aplicación considerable de insumos Fertilizantes, herbicidas, insecticidas) y aplicación de riego. Ahora se le cuestiona a este sistema de producción los daños que causa al medio ambiente, que no resolvió el problema del hambre, ni el de la pobreza. A esta "Revolución verde" se ha iniciado la oposición de la "Revolución azul", que significa la búsqueda de alimentos suplementarios en los medios acuáticos, tanto marinos como continentales.

Actualmente se efectúan inversiones de cierta magnitud en el desarrollo de programas de investigación con el fin de aprovechar los recursos potenciales del medio acuático hasta lograr en plazo perentorio, rendimientos tendentes a cubrir la demanda apremiante de alimentos.

Reseña histórica sobre producción en medios acuáticos

En Venezuela el cultivo de organismos acuáticos se inicia en 1937, con la introducción de huevos embrionados de tres especies de trucha: la trucha arco iris (Onchorincus mykiss), Salmo trutta, y la trucha de arroyo (Salvelinus fontinalis) por parte del Ministerio de Agricultura y Cría. Consolidándose el cultivo un año después con la construcción del primer centro de producción de alevines de trucha (La Mucuy), en el estado Mérida.

En años posteriores se introducen otras especies exóticas como carpa (Cyprinus carpio) especie que no prosperó y tilapia (Tilapia mossambica), que se centró al Lago de Valencia y más recientemente a otros cuerpos de agua.

En 1960 se comienza el cultivo del mejillón (Perna perna) y de la ostra (Crassostrea rhizoophorae).

En la década de los 70 se comienzan los ensayos de cultivo de camarón blanco en condiciones de laboratorio. Asimismo, en esos años se inicia la evaluación de nuestras especies, factibles a ser cultivadas. Se trabaja con cachama, palometa y coporo, concluyéndose que la especie con las mejores condiciones de cultivo era la cachama (MAC, 1990).

Pesca para selección de reproductores de cachama en la Estación de Guanapito, CIAE Guárico (Foto: W. Aragort).

En los años 80 se introduce una especie de camarón de agua dulce (Macrobrachium rosernberguii) en forma clandestina, legalizándose su entrada en 1988. De la misma manera se introduce la tilapia, legalizándose en 1992. Para 1994 estas dos especies se vislumbran como las de mayor potencial productivo debido a que pueden ser captadoras de divisas extranjeras y de gran aceptación nacional. Especies como la Cachama, lastimosamente pasan a segundo plano. Sin embargo, este hecho puede usarse para canalizar el cultivo según las metas que se quieran alcanzar; sea para cultivo extensivo, intensivo o superintensivo.

Métodos de explotación piscícola

Extensiva

Es aquella encargada de producir peces u otros organismos cultivables en estanques naturales o artificiales, represas, reservorios, manglares, pequeñas bahías y cualquier otra zona aparentemente acondicionada. Esta piscicultura se aprovecha de la productividad natural (fito y zooplancton) del agua para alimentar a los peces que se cultivan. Para este tipo de piscicultura es recomendable el uso de especies autóctonas como los Cíclidos (pavón y pavona), Cachama y su híbrido con Morocoto, que no causarían desequilibrio en el medio ambiente si llegasen a medios acuáticos abiertos.

Estanque de concreto para el engorde de truchas, 7ruch. Moconoque, estado Mérida (Foto: W. Aragort).

La piscicultura extensiva puede ser practicada por los organismos estatales fundamentalmente en lagos, ríos de grana tamaño cuyo control y manejo cuesta mucho dinero. De igual modo puede ser practicada por cooperativas, por centros educativos o de formación profesional. Este tipo de piscicultura ha sido apoyada en Venezuela por filiales de PDVSA en los estados orientales,

Guanapito, estado Guárico (Foto: (W. Aragort)

con el asesoramiento y apoyo de estaciones piscícolas del FONAIAP. Actualmente se desarrollan planes entre el FONAIAP, el MAC, las universidades, corporaciones (CORPOCENTRO, CORPOLLANOS, Corporación Venezolana del Sur Oeste) y filiales de PDVSA (CORPOVEN, LAGOVEN) para lograr un desarrollo acuícola nacional donde se beneficien los productores y la población rural.

Intensiva

En este tipo de piscicultura la naturaleza solo contribuye con el agua de primera calidad, la temperatura y otros factores que el hombre en todo caso controlará. F-1 alimento es totalmente concentrado o de otra naturaleza, siempre de la mejor calidad. La densidad de peces por metro cuadrado es alta, siendo buena la ganancia de peso.

Superintensiva

Son métodos sofisticados en los que se emplean sistemas de agua permanentes, otras veces usan sistemas de circulación y filtro para ahorrar el agua y sobre todo para asegurar la calidad y constancia de temperatura, con una conveniente depuración de sustancias de desecho de los peces (VINATEA, 1982).

La piscicultura y la diversificación agropecuaria tanto a nivel rural como con fines comerciales 

Nivel rural

La piscicultura de las zonas rurales de Venezuela donde existe gran cantidad de lagunas y embalses, debe ser concebida como una actividad complementaria dentro de los diferentes rubros agrícolas y pecuarios que se explotan en pequeñas fincas, asentamientos campesinos y caseríos. Así se producirán alimentos de buena calidad a bajo costo, para una población necesitada. A este nivel deben utilizarse, como se indicó anteriormente, especies autóctonas.

Con fines comerciales

Aquellos productores que quieran diversificar sus fincas o que posean fincas con agua en cantidad y calidad suficiente, pueden cultivar especies como la Tilapia que es una especie ampliamente estudiada, con excelente conversión de alimento a carne y de fácil comercialización. Actualmente se exporta para Colombia y su producción anual va en incremento de 400 t en 1993 y 700 t en 1994. Sin embargo, las especies autóctonas como la cachama, el híbrido cachama-morocoto, curito, coporo, bagre, , presentan potencial para determinados mercados que resulta interesante considerar porque además de los márgenes de ganancia, facilitarían disponer de cierto grado de diversidad con lo cual disminuirían los riesgos de la inversión.

Conclusiones y recomendaciones

En Venezuela han sido muchas las especies introducidas sin evaluar el daño que pudieran causar a especies autóctonas, las cuales habitaban un ecosistema convenientemente equilibrado por el proceso evolutivo de millones de años.

Hoy nos preguntamos: ¿Qué especies de peces existían en Los Andes venezolanos antes de la introducción de la Trucha?, ¿Cuál fue el impacto que produjo la carpa en los años 50. ¿Qué impacto tendrán la Tilapia introducida y el Camarón de agua dulce?.

Por ello, debemos pensar que todas las semanas del año son de conservación de nuestra naturaleza y que no deben ser prioritarios ciertos poderes como el económico los que determinan, en un momento dado, la introducción de una determinada especie acuícola. Porque es el medio ambiente natural el legado que dejaremos a las generaciones futuras.

Bibliografía

MINISTERIO DE AGRICULTURA Y CRÍA. 1980 Directorio de empresas acuiculturas a nivel nacional. Boletín informativo de pesca y acuicultura Nro. 4., 21 p.

VINATEA, J. 1982 Acuicultura Continental, Librería Stadium Editores. Lima, Perú 229 p.